La Unión Europa (UE) adoptará nuevas sanciones contra Siria el próximo lunes con el objetivo de aumentar la presión para que el gobierno del presidente Bashar al-Assad ponga fin a la violenta represión contra la población civil.

Según fuentes diplomáticas, la medida será oficializada en una reunión que los ministros de Exteriores de los Veintisiete celebrarán en Bruselas.

Con ello, otras 22 personas y ocho empresas tendrán congelados sus bienes en la UE y quedarán prohibidas de entrar en territorio europeo, elevando a 150 el número de afectados por las sanciones europeas.

Entre ellos se incluyen compañías petroleras, bancos y medios de comunicación.

De acuerdo con las últimas cifras difundidas por Naciones Unidas (ONU), al menos cinco mil personas han muerto desde el 15 de marzo de 2011 en los conflictos que oponen a las tropas gubernamentales y las milicias pro al-Assad a las fuerzas rebeldes que exigen la renuncia del presidente.