En el estado de Puebla el problema de la trata de personas es creciente, sus orígenes se advierten ante la falta de información de la gente, la desatención de la autoridad y la expansión del crimen organizado.
La pobreza, la falta de conocimiento, pero sobre todo el escaso seguimiento que se da a los pocos casos que se denuncian, dejan a la mayoría como "no resueltos", pero es evidente el crecimiento de éstos donde los menores de edad pudieron haber sido raptados, engañados o convencidos para incorporarlos a las redes de explotación.
La señora Martha Erika Alonso de Moreno Valle, presidenta del patronato del DIF en Puebla, reconoció que tan sólo en los meses de enero y febrero, se reportó la desaparición de 20 menores de edad en la entidad y que aún no se sabe que fue de ellos o bien si volvieron a sus casas, porque no hay un seguimiento adecuado a las denuncias.