El escritor argentino Ernesto Sabato murió a los 99 años en su hogar, cerca de la capital Buenos Aires.


Su esposa, Elvira González Fraga, dijo que él había sufrido en los últimos días de una bronquitis aguda.


El escritor era el último de una generación de grandes plumas argentinas. Su primera novela, El Túnel, le ganó un profundo respeto entre sus lectores contemporáneos, pero fueron sus dos siguientes novelas, Sobre Héroes y Tumbas, y Abaddón el Exterminador, lo que le otorgaron la reputación. En estos libros, Sábato exploró el aislamiento y la falta de comunicación entre los individuos, quienes a pesar de su silencio son arrastrados en una sucesión de eventos de los que no tienen ningún control, ni tan siquiera comprención.


Sabato nació el 24 de junio de 1911 en una familia acomodada de Rojas, en la provincia de Buenos Aires. De joven, se involucró de la efervecente atmósfera intelectual de la capital argentina, mientras ésta crecía y cambiaba vertiginosamente para entrar en aquello que nombraban "mundo moderno". Entre tantas ideas y tantos nuevos paises, Sabato decidió estudiar ciencias exactas en la universidad de La Plata.