Estamos listos para reanudar la temporada en Puebla, pero también listos para irnos a finales de este mes al festival de Novalle de Teatro Iberoamericano, en Chile, país donde hemos estado y regresaremos una vez más gracias a la grata respuesta de ese público y que la gente quiere volver a ver esta obra, dijo el director y productor de la obra, Pablo Moreno.
También apuntó “estaremos en febrero en España, en un festival de teatro en Valencia y otro en Barcelona, esperando dejar huella con esta obra; hasta el momento, donde la hemos llevado siempre hay buenos comentarios de nuestra propuesta experimental”.
La obra se estrenó en 1999 en la ciudad de Puebla, se ha presentado en diferentes estados de la República y diversos países como Estados Unidos, Argentina, Chile, Cuba y Taiwán.
La casa de los deseos cuenta con la dramaturgia de Alejandra Sofía y la dirección y producción de Pablo Moreno; la obra es una puesta única en su género, en donde se busca valorar los sentidos y valorar también a las personas discapacitadas porque quienes van desde antes de entrar al foro un grupo de asistentes les vendan los ojos a los presentes, para que todo lo que se exponga en la obra se perciba a través de los otros sentidos.
En un circo
La obra tiene como escenario principal un circo; el público ocupa los lugares alrededor de una supuesta pista. A través de la imaginación y los sentidos los asistentes experimentan todas las sensaciones posibles, pero siempre vendados de los ojos hasta que la obra culmina.
La trama desarrollará diferentes situaciones y circunstancias que harán que el público vaya conociendo a los personajes a través de su imaginación, viéndolos hasta el final de la obra, cuando se quitan los antifaces.
Otra cosa que hace diferente esta obra catalogada como “teatro experimental” es que al final salen a escena actores, productor y director para dialogar con los presentes acerca de esta experiencia y destacar así comentarios valiosos de nuestros sentidos y percepciones, en donde una vez más se enfatiza que a pesar de que muchos conocen la obra como “Teatro para ciegos”, a ésta puede asistir cualquier persona, porque el objetivo es aprender a valorar nuestros sentidos.
“Es una puesta que se puede disfrutar tanto de manera individual como en grupo, en familia o en pareja”, dijo el director.