Al menos 10 personas murieron y otras 13 resultaron heridas en un atentado registrado en Quetta, en el suroeste de Pakistán, después del rezo de la celebración del fin del Ramadán, el mes de ayuno musulmán.
La bomba, colocada en un automóvil, explotó en un estacionamiento cuando centenares de personas se dirigían a sus vehículos, indicaron fuentes de la policía local, reportó el canal paquistaní de noticias SAMMA.
Más de diez vehículos quedaron destruidos tras la explosión en un aparcamiento, y algunos edificios cercanos también registraron daños.
El atentado se produce también al inicio de un festival que celebran los musulmanes desde el 31 de agosto hasta el 3 de septiembre, al término de su mes de ayuno.
Las primeras imágenes de televisión mostraban el caos producido por la explosión y el daño severo en edificios cercanos, mientras las ambulancias llevaban a los heridos a hospitales.
Los informes preliminares indican que el área donde la explosión tuvo lugar es un zona poblada por minorías chiítas.
Quetta es la capital provincial de Baluchistán, donde militantes islámicos, que piden una mayor autonomía y control sobre los recursos naturales de la región, han encabezado una insurgencia de bajo nivel durante décadas.
Insurgentes aliados de los talibanes también están activos en la provincia que comparte fronteras con Afganistán e Irán.
