El Partido del Trabajo (PT), Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) y la agrupación política Morena ya tienen candidato para la Presidencia de la República y se llama Andrés Manuel López Obrador, reiteró el senador y coordinador del PT, Alberto Anaya Gutiérrez.

Sin embargo señaló que dieron un voto de confianza a López Obrador y a Ebrard para que negocien y encuentren la mejor forma de elegir al mejor candidato de izquierda, y no descartó tampoco a Cuauhtémoc Cárdenas, a quien definió como honorable y distinguido que puede ser considerado candidato si otras fuerzas políticas lo impulsan.

En entrevista luego de formalizarse la Asociación Nacional de Legisladores y ex Legisladores a favor de la Educación que le tocará presidir, anunció que a principios de octubre estos tres partidos harán las primeras encuestas y estudios de opinión para encontrar a los candidatos que los representarán en las elecciones de 2012.

Será un ejercicio para encontrar a los candidatos de estas organizaciones, que después en noviembre, si todo fluye de acuerdo a lo planeado, se medirán con los candidatos que proponga el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y de esa confrontación saldrán finalmente aquellos que representarán a la izquierda unida.

Respecto al candidato presidencial, recalcó que el suyo es López Obrador, aunque falta negociar con el jefe de Gobierno capitalino, Marcelo Ebrard, que ya se encuentra en la fase de evaluar las propuestas que han hecho diferentes casas encuestadoras para encontrar la mejor forma de conocer la opinión pública.

Por otro lado, el senador petista se refirió a los vaivenes económicos que se están registrando en todo el mundo y que en México se han traducido en un aumento inesperado en la paridad del dólar con el peso mexicano.

Consideró que el origen de la turbulencia se encuentra en el conflicto entre poderes que se vive en Estados Unidos, entre el presidente Barack Obama y los congresistas de ese país, que están enviando mensajes de pánico financiero a todo el mundo.

Anaya Gutiérrez afirmó que las reservas nacionales de México cercanas ya a los 200 mil millones de dólares garantizan la fortaleza y estabilidad del peso mexicano.

“Creemos que si algunos especuladores piensan que pueden hacer negocio se van a equivocar; el peso va a quedar en 12.50 como ha estado en los últimos meses, hay reservas suficientes para mantener la paridad del peso”, comentó.

Eso sí, lamentó que México se mantenga en una especie de letargo o desaceleración económica, y lo atribuyó al estancamiento que el país vive desde 1982 debido a la aplicación del modelo neoliberal, que se sigue utilizando por el actual gobierno que prefiere mantener la estabilidad, aun a costa de la recesión y la falta de crecimiento.