Carlos Gordillo Ramírez, presidente municipal de Izúcar de Matamoros, resaltó la tradición gastronómica que se tiene en el municipio.

“Nuestro pueblo ha convertido la tradición gastronómica en un universo extraordinario de colores, aromas y sabores, que la ha situado en un lugar destacado en la gastronomía poblana.”

“Estamos seguros de que nuestra herencia cultural son lazos que estrechan las relaciones en la comunidad, le dan identidad y rostro propio a la vez que facilitan la construcción de un futuro común y mejor.”

Entrevistado después de inaugurar la primera Feria del Atole y el Tamal, el edil izucarense sostuvo que la gastronomía en Matamoros —que incluye también el pozole, el mole, el guaxmole, la barbacoa, los panes de barrio y quintalero— representa una gran oportunidad para atraer turismo a la región.

Como el resto del estado, Izúcar de Matamoros ofrece lo mejor de su gastronomía a los visitantes que llegan para conocer sus maravillosos paisajes y lugares. Por lo anterior, dentro de la actual administración municipal se decidió replantear su política impulsando una campaña para al sector, donde el turismo gastronómico juega un rol muy importante.

“Muestra de ello es que ya tenemos institucionalizadas a nivel estatal dos ferias gastronómicas, que son la del pozole, la del atole y el tamal.”