Dentro de la reforma educativa que propuso la Presidencia de la República la semana pasada, todavía quedan pendientes importantes, entre ellos que los cargos de directores generales, directores de área y jefes de departamento de los diferentes niveles escolares se asignen por concurso de oposición, donde se tome en cuenta la currícula académica y no la currícula política, afirmó el director general de la Escuela Superior de Turismo “Roberto Cañedo Martínez”, Javier Ojeda Sosa.

Lo anterior, al asegurar que en el ámbito nacional no existe distanciamiento ni ruptura entre el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y el gobierno federal que encabeza Enrique Peña Nieto porque el magisterio nacional todavía controla e impone a los jefes de sector, a los jefes de enseñanza y a los supervisores, “quienes le deben la posición al SNTE y por lo tanto obedecen al sindicato magisterial”.

La imagen de ruptura que se tiene en diversos ámbitos del sector educativo, agregó Ojeda Sosa, es porque la autoridad federal conformó una estructura en que el titular de la Secretaría de Educación Pública y los subsecretarios de los diferentes niveles escolares no fueron propuestos por el SNTE.

“Eso causó que en muchos sectores sociales se hable de distanciamiento, pero con 45 años en el sector educativo y cargos en la administración pública estatal y federal.

”Puedo analizar que no existe tal distanciamiento, más bien se trata de una reubicación de posiciones, donde se pretende mostrar que la SEP toma el mando operativo de la educación y el sindicato el tema laboral.”



De la reforma a los hechos

Para Javier Ojeda Sosa, la reforma educativa propuesta por la Presidencia de la República no parece un mal planteamiento, sin embargo recordó que el tema se trae desde 1962, después en 1976 con Porfirio Muñoz Ledo, posteriormente con el presidente Miguel de la Madrid, “desde hace varias décadas se oye hablar de reformas y reformas, pero la única manera de separar el proceso educativo del SNTE será con los movimientos en los cargos en los estados”.

El director general de la EST afirmó que no se puede negar que los cargos directivos en los estados, el personal operativo y otros puestos claves en las dependencias educativas son propuestas del SNTE, “eso es innegable”, por eso reiteró que si se espera una verdadera reforma educativa en el ámbito nacional y que eso se repliqué a los estados, es fundamental que los cargos claves dentro de la administración educativa se asignen por examen de oposición.

En el proceso de transición administrativa en el país, se conformó el Consejo Nacional de Autoridades Educativas (Conaedu) que guiaba el trabajo a nivel nacional de la Secretaría de Educación Pública, por eso habrá que ver cómo camina la reforma educativa actual.