Un muerto dejó como saldo la explosión de un polvorín clandestino en la comunidad de San Miguel Xaltepec, en el municipio de Palmar de Bravo, informó la Dirección de Protección Civil del estado

En un comunicado se informó que aproximadamente a las 17:10 horas explotó el polvorín clandestino en la calle 5 de Febrero sin número, del barrio de San Isidro de la referida comunidad, ubicada al oriente del estado.

Un hombre de 59 años de edad perdió la vida y una mujer de 47 años fue atendida por crisis nerviosa.

El estallido se generó en un cuarto de cinco por cinco metros cuadrados donde se almacenaba pólvora.

Al lugar acudieron elementos de Protección Civil estatal y municipal, Bomberos, así como Seguridad Pública de la región y del estado. El Ministerio Público realiza las investigaciones para determinar lo ocurrido.

Por lo tanto, la Secretaría General de Gobierno hace un llamado a los ciudadanos a que denuncien cualquier polvorín o venta clandestina de productos pirotécnicos al teléfono 01 (222) 242 45 47 de Protección Civil estatal, al número de Emergencias 066 o al 089 para denuncias anónimas.

Cabe recordar que apenas en el mes de noviembre, la Policía Estatal Preventiva detectó presunto polvorín clandestino en Xicotepec, donde se aseguraron más de 22 mil cuetes y 126 cartuchos útiles de diversos calibres.

Mediante acciones de seguridad y prevención del delito, policías estatales preventivos aseguraron a tres sujetos en la junta auxiliar de Villa Ávila Camacho, perteneciente a Xicotepec de Juárez. Los individuos fueron sorprendidos cuando fabricaban fuegos pirotécnicos al interior de una casa, al parecer utilizada como polvorín.

Efectivos estatales al circular sobre la calle El Salto, con destino a la carretera federal de dicho municipio, se percataron de la actitud sospechosa de un sujeto que viajaba a bordo de una camioneta y que al notar la presencia de patrullas estatales, detuvo su marcha para descender y darse a la fuga con rumbo desconocido.

Al realizar una revisión ocular de la unidad, los elementos de la Policía Estatal Preventiva hallaron en la batea de la camioneta varios artefactos explosivos —de diferentes características— como cohetes de arranque, “cañones”, cohetes giradores, “palomas”, “bombas de luz” y “cometas”, entre otros.

Cabe señalar que durante la revisión de la unidad marca Dodge Ram tipo Pick-up 2500 modelo 1993 con placas de circulación XL-54-934 de Veracruz, se acercaron al lugar dos vecinos del lugar quienes manifestaron que con frecuencia el vehículo asegurado transportaba material explosivo en la zona.

Ante estos hechos, los uniformados procedieron a trasladarse a la calle principal del cerro del Tepeyac, donde ubicaron una casa construida de madera, la cual se encontraba abierta y en su interior se podía apreciar la presencia de varias personas.

Quienes se encontraban en el inmueble refirieron llamarse Cecilio Domínguez Barrios de 48 años de edad, Mario Martínez Vargas de 28 años y Moisés Sedeño Reyes de 48 años de edad.

Domínguez Barrios manifestó ser dueño del domicilio y dedicarse a la elaboración de fuegos pirotécnicos, sin contar con el permiso correspondiente para la utilización de pólvora, además intentó sobornar a los uniformados a fin de que no verificaran las instalaciones y el material que guardaban en el domicilio.

En el lugar fueron asegurados varios componentes químicos que se utilizan para la elaboración de la pólvora, como carbón vegetal, nitrato de potasio, clorato de potasio, magnesio metálico de potasio, PVC en polvo, entre otros. Además fueron hallados 126 cartuchos útiles: 119 de calibre 7.62 milímetros, 3 de calibre .45 milímetros y 4 de calibre 16.

Ante estos hechos, se procedió al aseguramiento de la mercancía, componentes químicos, cartuchos útiles y de los tres hombres quienes fueron puestos a disposición de las autoridades ministeriales para definir su situación legal.

La Secretaría de Seguridad Pública Estatal mantiene acciones preventivas para colaborar en la detección de espacios como bodegas o centros de fabricación de artefactos explosivos, que sin las medidas de seguridad indispensables, ponen en riesgo la integridad de los pobladores.