Las explosiones se han registrado en una mancha activa conocida como AR1748, teniendo una intensidad del tipo X1.7, X2.8 y X 3.23 (la clasificación es A, B, C, M y X, en orden de magnitud). 

Las dos primeras erupciones ocurrieron durante la noche de domingo al lunes, mientras que la más reciente terminó a las a las 1:11 horas (GMT) de este martes, convirtiéndose en la más potente de las tres.

El fenómeno fue captado por la cámara del Observatorio de Dinámica Solar (SDO) de la NASA, logrando tomar algunas espectaculares fotografías.

A pesar de que las llamaradas han sido relacionadas con eyecciones de masa coronal (CME, por sus siglas inglés), que son grandes ondas de radiación capaces llegar a la Tierra y afectar los sistemas de comunicación; todas se han registrado en la cara del Sol opuesta a nuestro planeta, de forma que por ahora no se ha registrado ningún daño.

De cualquier forma, las agencias espaciales alrededor del mundo continuarán al tanto de lo que suceda con el Sol, pues es posible dentro de las próximas horas ocurra una nueva erupción. 

Y es que a finales de este 2013, se alcanzará el punto máximo de actividad solar en un ciclo normal de 11 años.