Luego de conocerse los indicadores de pobreza en el ámbito nacional, que señalan que el estado de Puebla presentó retrocesos en el rubro, el analista económico de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), Marcos Gutiérrez Barrón, afirmó que los datos publicados muestran una realidad preocupante en la entidad poblana, porque el hecho de que exista pobreza en una parte importante de la población significa que hay exclusión social, pocas oportunidades para progresar y las personas que están en esas condiciones lamentablemente no tienen ninguna posibilidad y ninguna esperanza de acceder a mejores niveles de vida.

“En el estado de Puebla y en el resto del país —dijo el investigador universitario— las políticas gubernamentales no funcionan porque están muy viciadas, todos los programas sociales traen detrás de sí vicios importantes y no llegan a ser bien focalizados”, por eso agregó que se convierten en proyectos asistencialistas y por lo tanto no tienen el seguimiento adecuado para conocer en qué medida se logran los resultados planteados.

Pero además, reveló que en la mayoría de las ocasiones esos programas sociales son contaminados por cuestiones políticas y depende del color del partido en el poder la forma en que se canalizan los recursos públicos en forma de programas sociales. “Algo que se puede evitar con mayor transparencia en el uso de los programas sociales y con un seguimiento y verificación de los resultados y los objetivos que tienen en el estado de Puebla.

”El tema de la pobreza y la situación lamentable de las familias —aseguró Marcos Gutiérrez Barrón— ilustra la urgencia y la necesidad de aplicar políticas públicas focalizadas para atender el problema, y las autoridades deben entender que la pobreza solamente se soluciona si se generan oportunidades.”

Para el investigador de la UPAEP, “la forma de evitar que siga existiendo marginación es que la economía crezca a tasas más importantes, que el Producto Interno Bruto del crecimiento económico del estado de Puebla sea sostenido en el largo plazo, que sea arriba de 5 por ciento del PIB, es una prioridad importante, porque de esa manera se generan los empleos que la sociedad poblana demanda, es decir, los programas asistenciales son necesarios, sí, pero no pueden ser sostenidos en el largo plazo por la enorme necesidad de recursos públicos que requiere, por lo tanto tiene un límite, entonces la única oportunidad de generar crecimiento y evitar la pobreza de largo plazo es a través del crecimiento económico y la generación de empleo.

”Los datos sobre la pobreza en la entidad poblana —aseguró el investigador de esa institución educativa— son muy elocuentes, por lo que la exclusión social está muy arraigada, porque si existe pobreza y muchas necesidades también hay exclusión social. La exclusión social se entiende cuando un ciudadano, un niño o un padre de familia no tienen la oportunidad de acceder a un trabajo, a educación, a salud, a todos los medios que requieren para ser productivo y eficiente, esta exclusión social es consustancial a la pobreza, de ahí la importancia de evitarla.”

La pobreza es de largo plazo
Para el economista de la UPAEP, el tema de la pobreza se soluciona en el largo plazo, pero eso no significa que no se deba hacer nada, porque en el corto plazo se deben tomar medidas para que no siga en crecimiento. “Es un primer objetivo evitar que los temas de pobreza y exclusión social sigan creciendo en el estado y después irlo reduciendo gradualmente; se necesita alcanzar los estándares internacionales de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, a la que México pertenece”.