El senador de la República Javier Lozano Alarcón se pronunció por un “relevo total” en todos los órganos electorales de los estados, ante la creación del Instituto Nacional de Elecciones a partir de este año, y consideró que hubo excesos por parte de algunos gobernadores, principalmente del PRI, para influir en los resultados, e indicó que consejeros y magistrados locales se tendrán que ir.

Lozano Alarcón advirtió que el surgimiento del Instituto Nacional de Elecciones se da a raíz de una gran desconfianza por la conducta de varios gobernadores del Partido Revolucionario Institucional, que de plano se sirvieron con la “cuchara grande” y no tuvieron ningún recato en “meterle mano” a los procesos electorales con recursos públicos, y el colmo es que, cuando las quejas llegaban, las autoridades estatales se encuentran a las órdenes del gobernador.

Insistió en que la gran desconfianza lo que propició fue la creación del nuevo instituto que en un principio a los legisladores se les había pasado la mano, ya que el instituto iba a absorber todas las instituciones electorales tanto federales como locales.

El senador por Acción Nacional señaló que era una locura, y ahora se van a mantener los institutos estatales electorales los tribunales estatales electorales, y en lugar del IFE se va a tener el citado instituto que puede ser una necedad el cambiarle el nombre y hacer el gasto que implica.

Advirtió que en las nuevas reglas el órgano electoral tanto los consejeros como magistrados de institutos y tribunales en los estados se van a tener que ir, y viene una renovación completa de todos los institutos estatales y federales.

Expresó que ahora la selección de magistrados y consejeros será por medio de un método mixto donde va a existir el servicio profesional a través de un proceso de auscultación determinado por la Cámara de Diputados con mayoría calificada que va a seleccionar a los consejeros nacionales y después vendrán las propuestas ciudadanas que serán aprobadas por el voto de las dos terceras partes del Senado para poder ser consejeros de los institutos estatales electorales.

Manifestó que con la Reforma Electoral aprobada en 2013 se saca a los gobernadores de la jugada, y los nombramientos vienen de la manera señalada, además de que en el Senado están los representantes de los estados y se mantiene el federalismo.

Reiteró que lo mismo sucederá con los magistrados de los estados, además de que lo que ellos decidan no es la última palabra, ya que está el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

Consideró que esta acción dará certidumbre a los ciudadanos y hay que esperar que todos respeten los procesos, ya que de lo contrario se tendrán que seguir haciendo modificaciones por la intervención irregular de los ejecutivos en los estados.

Sin tiempo para la reforma

Posteriormente al ser cuestionado sobre si habrá tiempo para elegir un gobernador por cuatro años ocho meses, consideró que se ve muy difícil cualquier cambio constitucional en Puebla para modificar los períodos gubernamentales, pues ya están marcados los tiempos.

Recordó que en 2016 se habrá de elegir una gubernatura corta de un año ocho meses y después se empatará, e indicó que lamentable que no se haya avanzado lo suficiente en la homologación de los períodos electorales, y fue de las cosas que faltaron también a nivel nacional junto con la eliminación de plurinominales en el Senado de la República.

Izquierda peñista


Asimismo, sobre los nuevos impuestos que entraron en vigor a partir del 1 de enero el senador de la República aprovechó el momento para recordar que fueron los legisladores perredistas quienes, pese al riesgo que representaba la Reforma Hacendaria que propuso el Ejecutivo Federal, la aprobaron y esto su puede llevará a una profunda crisis; asimismo, de su futuro político indicó que en estos momentos tiene un cargo pero sus aspiraciones pueden ser locales o a nivel federal.

Precisó que la Reforma Fiscal de Peña Nieto —y avalada por el Consejo Rector del Pacto por México— no recaudará lo proyectado, endeudará al país, resta competitividad a nuestra economía y, lo peor de todo, lastimaría severa e injustamente a las familias mexicanas de las clases medias.

El legislador señaló diversos puntos del documento del cual dijo el PAN lo rechazó tanto en la Cámara de Diputados como en la de Senadores.

Recordó que el PRD estaba avalando una iniciativa del presidente de México que planteaba gravar con el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a una tasa de 16 por ciento, el pago de colegiaturas, los intereses y comisiones de créditos hipotecarios, la enajenación y arrendamiento de casa habitación y el servicio de transporte público foráneo. “Ah, también la goma de mascar (el chicle, pues), la venta de perros, gatos y pequeñas especies (mascotas), además de los productos procesados para su alimentación”.

Añadió que se propone aumentar la tasa de interés del Impuesto Sobre la Renta de 30 a 32 por ciento a las personas físicas con ingresos anuales de los 500 mil pesos. Para el caso de venta de casa habitación también se reduciría el monto exento de 1.5 millones de Udis (aproximadamente 7.5 millones de pesos) a solamente 250 mil Udis (cerca de 1.2 millones de pesos).

Manifestó que la intención era cargarle la mano a quienes tienen cautivos: a los padres de familia que con gran esfuerzo forman un patrimonio para sus hijos a lo largo de los años y que, en ausencia de una educación pública de calidad se ven obligados a inscribirlos en escuelas privadas. Sobre ellos sería la peor carga de este intento legislativo que, definitivamente, no debe prosperar.

Javier Lozano dijo que mientras la izquierda se rasga las vestiduras deja que se le pegue a la clase trabajadora con ese actuar.