Los daños que se han detectado en diversos tramos de huellas guía para personas con capacidades diferentes en el centro histórico son atribuibles a vehículos que son estacionados en banquetas, así como una deficiente colocación del material, que se ha visto afectado por los cambios de temperatura.

Aunque el DIF municipal realizó la petición a la Secretaría de Obras Públicas por estos daños, presumiblemente hechos por las actuales obras en la zona, éstos no fueron atribuibles a ello, sino a otros factores.

De acuerdo al secretario de Desarrollo Urbano de la capital, Felipe Velázquez Gutiérrez, estos daños a las huellas podotáctiles son atribuibles en primer lugar a personas que irresponsablemente estacionan sus vehículos sobre las banquetas.

En este sentido, señaló que automovilistas particulares, así como empresas de pipas de agua que surten este líquido en el primer cuadro de la ciudad, son los responsables de afectar esta infraestructura colocada para discapacitados.

Aseguró que los particulares y empresas que usan las calles del centro histórico para carga y descarga de diversos servicios suben los vehículos a las banquetas ocasionando las principales fracturas de estas huellas.

El funcionario municipal destacó que estos daños se han presentado en diversas vialidades del primer cuadro de la ciudad como la 5 Poniente, 2 Poniente, 4 Sur, 8 Poniente, entre otras avenidas.

Recalcó que una vez que se detecta el daño por parte de empresas surtidoras de agua o de particulares, se procede a la reparación, pero también si son sorprendidos son sancionados para cubrir los gastos de reposición.

“Lamentamos que aún hayan personas irresponsables que cometen este tipo de daños al subir sus vehículos, van desde autos particulares hasta pipas de agua que se suben a las banquetas para surtir este liquido en comercios y casas de la zona”.

El segundo motivo por el cual se han dañado estas huellas tiene que ver con errores en los materiales que colocaron empresas contratadas por la Secretaría de Infraestructura durante la atención del Corredor Fuertes-Catedral.

Aseguró que este problema se ha venido presentando porque el material que fue colocado no ha resistido el cambio de temperatura, por lo que se ha solicitado a la dependencia estatal obligue a las empresas que contrató a que repongan estos elementos.

Velázquez Gutiérrez identificó que el denominado “Polígono Verde”, que comprende de la 8 a la 12 Poniente y que fue intervenida por el gobierno del estado, es el que más presenta defectos en esta infraestructura.

El encargado de las obras públicas en la capital detalló que los materiales aplicados por las constructoras —resinas en especial— no fueron las adecuadas para resistir los cambios de temperatura por lo que se ocasionaron estos desprendimientos.

Ante ello, reiteró que estos problemas se han reportado a la Secretaría de Infraestructura para que se comiencen a realizar los cambios de materiales y así dejar en buenas condiciones, así como transitables para las personas con capacidades diferentes.