La detención del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”, hace que se prendan los “focos rojos” de la presencia de crimen organizado en Puebla, ya que se están empezando a mezclar los hilos entre los grupos delictivos y la sociedad.

Así lo aseveró el politólogo Manuel Díaz Cid, quien agregó que esta detención no se puede tomar con la tranquilidad de que no se realizó en el estado, pues Puebla fue la entidad donde se detuvo a uno de los delincuentes que fue el principal nexo para la captura de este criminal.

En entrevista, Díaz Cid aseveró que lo que llama la atención es que por mucho tiempo estuvo establecido el principal nexo con “El Chapo” Guzmán, Daniel Fernández Domínguez, alias “El Pelacas”, lo cual se puede traducir en que los criminales que están establecidos en el estado no sólo vienen de vacaciones —como se ha señalado—, sino que más bien están peleando “la plaza”.

“Debe de reflexionarse. Si los criminales están en Puebla no sólo es para tener vacaciones, como pareciera insinuar alguien, sino porque los criminales se sienten cómodos como para poder hacer muchas cosas, y adonde están los dirigentes de los grupos criminales inevitablemente se convierten esos lugares en puntos de operación y eso no es bueno para la sociedad”.

El especialista manifestó que es importante que se tomen las acciones necesarias para evitar que se sigan estableciendo, ya que no sólo Puebla se ha vuelto una zona de descanso, por lo que no se pueden menospreciar estos acontecimientos, ya que las consecuencias serían graves para la comunidad.

Aceptó que en estos momentos no se puede hablar de que hay una situación de inseguridad como en otros estados del país; sin embargo, no es necesario que se llegue a ese punto para actuar.