De los nueve suplentes que hay para poder ocupar el cargo de consejero electoral ante la renuncia de Víctor Cánovas Moreno, sólo Martha Patricia Velázquez Aguilar manifestó su interés de participar, por lo que se anticipa que, en caso de no llegar a un acuerdo en el Congreso del estado, el Instituto Electoral del Estado, próximo a desaparecer, operará con sólo ocho integrantes.

Al terminar la pasarela de los consejeros electorales suplentes en lo oscurito que podrían suceder a Víctor Cánovas Moreno, sólo la abogada Martha Patricia Velázquez Aguilar reconoció su interés por ocupar el cargo; en tanto, seis de los nueve no se presentaron a la entrevista y los dos restantes que acudieron se negaron a participar.

La Junta de Gobierno y Coordinación Política invitó a los nueve suplentes que fueron electos en octubre de 2012, en la lista estaban: Andrés Acosta Enríquez, Lidia Aguilar Balderas, Víctor Manuel Bravo Polaco, Heriberto Castillo Miranda, Juan Manuel Crisanto Campos, Cristhian Arnaldo Fernández Lópezlarsen, María Genoveva Jiménez Cerezo, Joel Paredes Olguín y Martha Patricia Velázquez Aguilar.

Al llevarse este día la entrevista con los consejeros suplentes, sólo Martha Patricia Velázquez, Joel Paredes Olguín y María Genoveva Jiménez Cerezo acudieron a entrevistarse con los integrantes de la Junta de Gobierno, encabezada por Víctor Manuel Giorgana Jiménez.

Los primeros en pasar fueron Genoveva Jiménez Cerezo y Joel Jiménez Olguín, quienes indicaron que por cuestiones personales no pueden aceptar la invitación. Genoveva Jiménez señaló, en entrevista ante los medios, que en estos momentos trabaja en el Servicio Profesional Electoral y acudió ante los legisladores locales en atención a la invitación.

En entrevista, indicó que no está dentro de sus propósitos estar en el organismo local, y aclaró que su decisión no tuvo que ver con lo referente al caso Cánovas Moreno, sino por cuestiones de trabajo.

Señaló que ve al Instituto Electoral con fortalezas y el seguirse mejorando, además de que es una oportunidad de hacerlo.

Por su parte, Joel Paredes Olguín, quien ya fue consejero electoral, indicó que en la entrevista con los legisladores solo expresó su agradecimiento por el llamado, pero les expresó que está dedicado a la actividad privada y académica, por lo que prefiere mantenerse al margen y no ser considerado para la sustitución del candidato.

Paredes Olguín, al ser cuestionado sobre lo que requieren los órganos electorales, declaró que después de su experiencia como consejero durante seis años, sería sano que desarrollaran de cara a la opinión pública a los grupos académicos, a ciertos grupos de la sociedad, una política mucho más clara, mucho más definida, que permitiera informar acerca del desempeño que tiene.

Comentó que se sufre un desprestigio, un “golpeteo” terrible, y muchas cuestiones valiosas de los órganos electorales se dejan de lado por parte de la opinión pública. Expresó que hay que desarrollar una política más agresiva de comunicación social que les de a conocer a los ciudadanos la participación de los institutos. Del caso de Víctor Cánovas, indicó que fue saludable la renuncia, en la medida en que salva a la institución de las consecuencias que pudo tener su permanencia.