El secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, cambió hoy su discurso sobre los preparativos de Brasil para el Mundial de Fútbol, y afirmó que el evento será un éxito, pese a los retrasos en varios sectores, cuando faltan sólo 69 días para el inicio del evento.

"Desafortunadamente, el pesimismo es una tendencia usual cuando se trata de la realización de eventos de gran porte. Pero, al final, las cosas siempre funcionan", expresó Valcke en su columna publicada este viernes en la página de la FIFA en internet.

Los comentarios del dirigente fueron divulgados un día después de haber admitido en declaraciones reproducidas por el diario brasileño Estado de Sao Paulo que faltando exactos 70 días para la inauguración del Mundial de fútbol de 2014 los preparativos no estaban listos.

"Si usted quiere que yo resuma (la situación), no estamos listos. Tenemos dos estadios donde debemos trabajar", dijo Valcke, en alusión al estadio Arena Corinthians de Sao Paulo, sede del partido inaugural, y al Beira Rio de Porto Alegre, que recibirá cinco encuentros durante la Copa Mundial.

En el caso de la Arena Corinthians, la instalación de las gradas temporales fue suspendida el lunes por orden del ministerio brasileño de Trabajo debido a la muerte el sábado pasado de un obrero que se desplomó desde ocho metros de altura mientras trabajaba en este servicio.

Además, un informe del Cuerpo de Bomberos de la ciudad de Sao Paulo, presentado el martes, apuntó que los responsables por la obra del estadio todavía deben atender a 26 exigencias en lo que se refiere a la seguridad de la arena y a su vez, la fiscalía amenazó el miércoles con la interdicción de la Arena Corinthians "en caso de incumplimiento o cumplimiento parcial de las demandas".

En el texto divulgado este viernes, el número dos de la FIFA aseguró que "todos los informes que recibo indican la velocidad y el ahínco del trabajo en Brasil en este momento para concluir los preparativos no sólo para la Copa del Mundo, sino también para las mejorías de la infraestructura cultural, urbana y de transportes que continuarán a servir a generaciones futuras".

Valcke añadió que "el mismo escepticismo frente a Brasil 2014 existió en la recta final de la preparación de Sudáfrica para el Mundial de 2010, y sostuvo que hoy queda en claro que aquella  fue una Copa del Mundo brillante que alimentó la confianza de toda una nación y aumentó la confianza para los negocios internacionales".