Ernesto Cordero y Juan Manuel Oliva iniciaron su gira por Puebla. Primero, los aspirantes acudieron a San Martín Texmelucan. Desde ese municipio, Ernesto Cordero pidió a Rafael Moreno Valle renunciar si quiere coordinar la campaña de Gustavo Madero Muñoz a la dirigencia del PAN. También le exigió a Moreno Valle que deje sus prácticas priistas si quiere ser presidenciable.

En Puebla, desde el barrio de Santiago, corazón del panismo poblano, ya con el ánimo caldeado, Ernesto Cordero les dijo a los panistas que no se dejen intimidar por ningún gobernador, porque el PAN es más grande que los gobernadores. El mitin ensalzó los valores democráticos de Gómez Morín en el panismo.

Los panistas de la dupla Cordero-Oliva intentaron realizar una reunión en el comité directivo municipal del PAN. Instalación partidista que no se les prestó a la dupla, por lo que hicieron un mitin en la calle. El morenovallismo intentó frenar las actividades de Cordero y Oliva. Horas antes de su llegada a Puebla, el vocero de la campaña, Max Cortázar, denunció que Rafael Moreno Valle bloqueó actividades de los aspirantes. 
  
Las instalaciones de los comités municipales que el grupo de Cordero y Oliva solicitaron para realizar las reuniones no se les prestaron con diversas justificaciones. A pesar del bloqueo intentado por los morenovallistas para frenar la reunión de Cordero-Oliva en la ciudad de Puebla, las más de mil personas que se reunieron afuera de las instalaciones del PAN corearon a la dupla: “Aunque no nos dejen entrar al comité municipal de Puebla, aquí estamos los militantes de a pie y no nos dejamos intimidar”.

Cordero se dirigió a la entrada del comité municipal. El ingreso al edificio —adquirido con prerrogativas de los partidos políticos— se les vedó a los panistas. Un anuncio señalaba que no había personal porque habían ido a un curso. Cordero le pidió a Pablo Rodríguez Regordosa que se comportara como un panista demócrata.

Mientras tanto, los seguidores de Cordero abucheaban a Rodríguez Regordosa. Otros gritaban: “Lo regaña el gobernador”. El mensaje de Ernesto Cordero se concentró en pedir el voto libre a favor de su causa y no dejarse intimidar por ningún gobernador, debido a que el PAN es más grande que cualquier gobernador.

Los panistas abuchearon a Pablo Rodríguez Regordosa por no dejarlos ingresar a la sede municipal del blanquiazul. El buen ánimo encendió a los panistas poblanos. Antiguos liderazgos del blanquiazul como Francisco Fraile García y Ana Teresa Aranda, además de Fernando Manzanilla Prieto, coordinador de la campaña de Juan Manuel Oliva, pidieron a los panistas apoyar a la dupla Cordero-Oliva.

Otro morenovallista, Javier Lozano Alarcón, arengó a los panistas a respaldar a la dupla: “No señores. No seguí la línea.”

“¡Cordero, Cordero, Cordero!”, coreaban los panistas, “Vamos a ser una oposición digna. Vamos a darle un combate frontal a los moches. Yo les pido que no sigan la línea sino la fórmula de las ideas de Cordero y Oliva”.

Ana Teresa Aranda fue recibida con aplausos y porras. La Doña se sintió como en sus épocas cuándo enfrentaba al exgobernador Manuel Bartlett Díaz, que le arrebató al panismo la elección de Huejotzingo. Pero la realidad la había rebasado por la derecha neoliberal, tricolor y hardvariana del morenovallismo.

La Doña no se amilanó. La opositora al morenovallismo, la Doña que le disputó la candidatura al gobierno de Puebla, tomó el micrófono con energía en un deja vú democrático. Frente a la multitud de panistas, a Aranda se le veía radiante. Engallada, la dirigente que se formó desde la oposición dijo: “Estar aquí es recuperar la mística del PAN”.

Aranda se refirió a la convocatoria de juntas auxiliares impugnada por la oposición: “Acaba de echar abajo la convocatoria de juntas auxiliares —hizo una pausa—. Esa imposición ya se les cayó”, clamó la dirigente blanquiazul. “Y ahora vamos contra la imposición del 18 de mayo.

”Vamos a reencauzar el camino del PAN. A pesar del chantaje, de la presión y de la intimidación. No a la imposición, no a la imposición”, gritaron los panistas.

El exdirigente del PAN Francisco Fraile García resaltó la historia del panismo y de cómo la casa panista de la 17 Poniente se convirtió en una casa para los panistas. La misma casa panista cerrada ayer por la noche.

El pastor se dirigió a los panistas. Pero sus cachorros no estaban con él. “Este lugar tiene historia. Esta casa la dio el Gobierno Federal, le debemos esta casa a dos hombres: Luis Hinojosa y Pedro de la Torre García Cano. Los panistas tenemos esta casa gracias a la visión de estos hombres”.

Fraile García, animado, recorrió el templete: “Puebla necesita una sacudida. Puebla necesita una sacudida de honor. Puebla necesita una sacudida para que los panistas en plena libertad puedan votar porque quien se les dé la gana”, los panistas ovacionaron la referencia democrática del expastor blanquiazul.

Y Fraile García, como en los tiempos en que encaraba a los gobiernos priistas, dijo: “La libertad puede más que la tiranía”. La oratoria clásica, al añejo estilo del panismo democrático, encendió a la gente. “El PAN es azul, el PAN es azul, el PAN es azul”, gritaron los asistentes al encuentro blanquiazul.

Fernando Manzanilla Prieto, exsecretario de Gobierno de Rafael Moreno Valle y amigo del gobernador de Puebla, relató el intento de bloqueo de los morenovallistas: “Hoy trataron de impedir que muchos vinieran. Pero nadie nos puede parar.”

El estratega de la causa de Cordero y Oliva demostró que sus seguidores le son leales a pesar de su anticlimático discurso. Breve pero didáctico, Manzanilla Prieto le atizó al público, que se encendió tibiamente. La gente le respondió poco a poco.

El exgobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, tomó la palabra. Oliva, aspirante a secretario del PAN, apeló a la memoria histórica del panismo. Desde Gómez Morín hasta Carlos Castillo Peraza, el extinto filósofo. Pasando por Maquío y por Fox.

Entrón, a la vieja usanza del sinarquismo del Bajío, Oliva inició: “Yo extraño al PAN de Luis H. Alvarez, de suela y de sudor”. Oliva pidió regresar el PAN a la sociedad. Y para Puebla pidió un gobernador panista.

El aspirante a la dirigencia del PAN Ernesto Cordero, ya con la militancia prendida, exhortó a los panistas a emitir su voto libremente. Cordero defendió los gobiernos panistas de Vicente Fox Quesada y de Felipe Calderón Hinojosa.

El exfuncionario calderonista enlistó las acciones de gobierno de los gobiernos del blanquiazul y arremetió en contra de Madero, su oponente, de quien señaló su cercanía con el PRI y con Enrique Peña Nieto. El aspirante a la dirigencia blanquiazul afirmó: “En el PRI el gobernador tira línea. Y quiere que todos se plieguen a él. En el PAN no nos gusta que nos traten como priistas”.

“Fuera del PAN los priistas”, gritaron loa panistas. Mientras, Cordero sonreía a las claras alusiones morenovallistas. Los panistas entonaron el himno a su partido. La luz se apagó y, con unas velitas de la esperanza, los panistas de antaño entonaron su nostálgico himno.