Luego de la protesta del pasado viernes, de elementos de la Policía Estatal Preventiva (PEP) en Casa Aguayo, donde denunciaron malas condiciones laborales y los salarios por debajo de la media nacional, el secretario de Seguridad Pública Estatal, Facundo Rosas Rosas, sentenció que no habrá aumentos.
En entrevista, el funcionario estatal señaló que aunque se analizarán las peticiones de algún recurso adicional indicó que su salario es relativo, evadiendo responder concretamente a los reporteros.
“Todo es relativo y además los mecanismos para acceder a los presupuestos no son simplemente una ocurrencia. Es un tema muy serio que se tiene que revisar, no se puede hablar a la ligera y tampoco se pueden hacer amagos”, advirtió.
Los uniformados amenazaron con irse a huelga en caso de que no sean escuchadas sus peticiones, sobre todo en cuestión salarial, por lo que dejó entrever que se no se permitirán que realicen ningún movimiento, basados en la ley.
“Está muy claro en el reglamento y en lo que marca la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, pero yo no pasaría al terreno de las descalificaciones o de algún amago, simplemente se va a cumplir con la ley, creo que en ese terreno todos estamos obligados a respetar”, señaló.
“Hay obligaciones que tenemos que cumplir, que hay algunos ciclos que se tienen que ir cerrando también.
”Me refiero particularmente al tema de control de confianza, estamos en esa fase en la etapa final para definir cuál va ser es el siguiente paso y entiendo que habrá algunos ajustes en todos los aspectos”, siguieron las advertencias.
Por lo tanto, señaló que se tomarán en cuenta los resultados del examen de control de confianza, por lo que incluso podría haber despidos de agentes en este mes.
El viernes los inconformes acordaron, tras una reunión con autoridades de la Secretaría General de Gobierno (SGG), que no harían una marcha este domingo 4 de mayo, como lo habían advertido, por lo que se abstendrían de ello por lo menos esta semana.
La protesta y la carta
Fue este viernes cuando elementos de la PEP protestaron afuera de Casa Aguayo por las carencias laborales y bajos sueldos, por lo que exigieron una mesa de diálogo para las mejoras salariales, sobre todo.
Al lugar llegaron más de cien elementos vestidos de civil con pancartas en contra del gobierno y el mandatario estatal, Rafael Moreno Valle, como: “No pido 1 peso prestado, porque mis policías pagan mis puentes de piedra”, entre otros.
Antes de la protesta, por medio de una carta abierta denunciaron amenazas de sus altos mandos de ser despedidos, y hasta encarcelados, solo por solicitar una mejora en sus condiciones laborales y mejora de salario.
Aseguraron que están ganando 29 centavos diarios más, en comparación con lo que percibían en 2009.
En la misiva dirigida al presidente de México, Enrique Peña Nieto; al gobernador, Rafael Moreno Valle Rosas, y a los medios de comunicación locales y nacionales, los uniformados señalaron que tienen uno de los peores sueldos del país, por debajo de la media nacional.
Detallaron que el pasado 28 de abril un grupo de aproximadamente cien integrantes de la PEP “hartos de la situación económica”, se reunieron para presentar sus exigencias laborales a sus dirigentes, sobre todo a Facundo Rosas Rosas, secretario de Seguridad Pública Estatal.
Señalaron que durante cinco años no han recibido incremento salarial, por lo que decidieron reunirse en el parque Jerusalén, ubicado sobre la calle 9 Oriente, entre las calles 12 y 14 Sur.
El parque está ubicado a unas cuadras de la base central de la 9 Oriente, reunión que tuvo la finalidad de elaborar un documento para presentarlo ante las autoridades correspondientes, alegando su derecho a reunión plasmado en la Constitución mexicana.
“(…) acatando siempre el marco jurídico y apegándonos al artículo noveno constitucional”.
Sin embargo, a la reunión, indicaron, arribaron de manera abrupta algunas de sus autoridades, quienes no fueron convocados ni mucho menos invitados.
Ahí llegó Aldo Constancio Rodríguez Mejía y el teniente Marco Antonio Estrada López, director de Asuntos Internos y de Grupos Especiales de la Secretaría de Seguridad Pública, respectivamente.
“(…) el último de los citados arribo con una célula de policías armados (desconociendo con qué fin)”, subrayaron.
Acusaron al titular de la Dirección de Asuntos Internos, quien tomó la palabra “en varias ocasiones, intentando amedrentarnos poniendo ejemplos de que él durante su paso en diferentes áreas de la administración pública federal había disuelto manifestaciones como la que estábamos llevando a cabo en ese momento”.
El funcionario les indicó a los inconformes que mediante el uso de la fuerza pública logró disolver las manifestaciones y que varios integrantes de la Policía Federal habían sido encarcelados por ese motivo.
“Se le respondió que no estábamos llevando ningún acto de manera ilegal y se le pidió de la manera más respetuosa que nos permitiera continuar con nuestra reunión, a lo que el director en cuestión accedió”.
Pero antes de acceder, les advirtió que él es el garante de todas nuestras actuaciones diarias y que estará pendiente de todas y cada una de ellas para imponer las medidas disciplinarias que correspondan.
“Diez minutos después arribó al mismo lugar en el que nos encontrábamos el propio secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas Rosas, quien nos cuestionó a cerca de nuestras inconformidades”.
Indicaron que, acto seguido, varios compañeros le hicieron saber de las carencias que vive cada uno de los integrantes de la Policía Estatal y todo por que el sueldo se encuentra muy por debajo de la media nacional.
“El secretario mencionó que desde que él llegó a Puebla se encuentra trabajando en la mejora salarial, pero se le hizo mención que hasta la fecha no se han visto sus resultado”, dijeron.
Por lo tanto, el funcionario del gabinete estatal les mencionó que antes de pedir deberían de dar, ya que era muy difícil hacerlo al revés.
“(…) se le contestó que de acuerdo a las encuestas en Puebla, se redujo en 14 por ciento el robo de vehículos, cuando a nivel nacional este mismo delito solo se ha logrado reducirlo en un 10 por ciento.
”Con este simple ejemplo, al secretario se le mencionó que el trabajo se realiza día con día y por ese mismo motivo las autoridades deberían de voltear a ver los sueldos de los policías estatales”.
Señalaron que se le hizo hincapié para que por medio de su conducto le solicite al gobernador del estado, Rafael Moreno Valle, una partida emergente para cubrir un aumento salarial a todos los policías estatales en lo que llega el aumento, que según será solicitado para el próximo año.
Y mencionaron palabras textuales del secretario Rosas Rosas: “Debemos de esperar por lo menos nueves meses para que sea en el presupuesto del próximo año en el que tengan el aumento salarial”.
“Se le hizo mención que la situación económica de cada uno de los elementos no puede esperar más, ya que los productos de la canasta básica día con día aumentan y nuestro salario sigue igual o peor”.
Señalaron en el texto que al término de la reunión no hubo ningún acuerdo con el secretario Facundo Rosas Rosas, ya que él solo se comprometió a revisar el horario de trabajo, ya que en la actualidad se laboran turnos de 24 horas de trabajo por 24 de descanso.
“Manifestándole que este horario no es viable, ya que el personal no se encuentra del todo descansado cuando nuevamente se tiene que presentar a su labores al día siguiente”.
Los inconformes marcharon hacia Casa Aguayo y presentaron su pliego petitorio. Los más de 200 elementos de elementos de la Policía Estatal Preventiva exigieron al gobierno de Rafael Moreno Valle resolver el conflicto; la protesta duró más de cinco horas.
Al final, los inconformes alcanzan un acuerdo con Luis Arturo Cornejo, secretario de Asuntos Políticos y Gobernabilidad de la Secretaría de Gobernación. Será el próximo viernes cuando las autoridades correspondientes entreguen una respuesta a los requerimientos de los uniformados, por lo que se logró el retiro de la manifestación y se eliminó la posibilidad de paro para próximo lunes.
