Luego del altercado que se suscitó el pasado 26 de julio de 2014 en el interior del Centro de Reinserción Social (Cereso) de Huejotzingo, en donde un grupo de internos retuvo al director del centro penitenciario, Felipe Ruiz Báez, el edil Carlos Morales Álvarez dio conocer que la administración continuará realizando las revisiones necesarias a fin de mantener el orden y la seguridad.

A través de un comunicado emitido por la comuna, el alcalde Carlos Alberto Morales Álvarez indicó que durante la riña personal del Cereso solicitó el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal y de la Dirección General de Ceresos del estado, quienes arribaron al lugar para entablar un dialogo con los internos y así restaurar la estabilidad al interior.

De acuerdo con las autoridades, los internos sólo fingieron la riña con el propósito de ejercer presión en contra de las autoridades debido a que se rehúsan a acatar las reglas que conforme al marco normativo ha impuesto la presente administración, que en repetidas ocasiones ha realizado operativos decomisando teléfonos celulares, armas punzocortantes y diferentes tipos de drogas.

“En este sentido, la actual administración continuará realizando revisiones exhaustivas al interior del Cereso, con el objeto de garantizar la seguridad de toda la población penitenciaria, logrando así erradicar vicios que se habían acentuado con el transcurso del tiempo asociado a la falta de atención de autoridades en turno”.

Finalmente, el edil Carlos Alberto Morales Álvarez dijo que el gobierno que preside seguirá actuando conforme a derecho e implementando estrategias que contribuyan a lograr una real reinserción social de los internos; además, mencionó que seguirá gestionando recursos a fin de construir un penal más amplio y seguro, dando solución al problema de sobrepoblación que aqueja al lugar.

Cabe mencionar que, según una fuente ministerial, la población penitenciaria acusó irregularidades al interior de la cárcel, las cuales no fueron especificadas. Los internos tomaron de rehenes a varios custodios y exigieron la presencia del director del Centro de Reinserción Social, quien en ese momento no estaba en el lugar.