La Organización Mundial de la Salud estima que alrededor de 84 millones de personas morirán a causa de esta enfermedad 2005 y 2015, toda vez que es el cáncer más frecuente entre las mujeres, tanto de países desarrollados como en desarrollo. 

Por ello que en todo el mundo, en octubre se hace presente el color rosa, lo que hace identificar las iniciativas solidarias que se ponen en marcha en el mundo para insistir en la importancia de la información y prevención para vencer este mal.

En México el cáncer de mama constituye, a partir del 2006, la primera causa de muerte por neoplasia maligna entre las mujeres mayores de 25 años de edad, con 4 mil 400 defunciones registradas y una tasa de mortalidad de 15.8 fallecimientos por 100 mil mujeres en este rango de edad, lo que representa un incremento de 9.7% en relación con el año 2000.

En este marco, el subdelegado médico del ISSSTE, Héctor Mario Hernández Lobato, aseveró que nadie es inmune al cáncer de mama; sin embargo, destacó que la detección temprana es la clave para evitar el cáncer de mama, por lo que descubrir a tiempo esta enfermedad es importante acudir a la revisión médica una vez al año, como mínimo, así como es indispensable llevar estilos de vida saludables para disminuir el riesgo de padecerlo.

Dijo que la autoexploración es esencial, por lo que las mujeres deben tocarse y explorarse los senos y, en caso de descubrir bolitas o secreciones, deben acudir inmediatamente al médico. 

Inclusive, las féminas con más de 40 años de edad deben practicarse una mastografía, la cual es la única intervención que ha demostrado ser efectiva para disminuir la mortalidad por cáncer de mama

El facultativo del ISSSTE señaló que con mayor razón deben cuidar su salud las mujeres que tienen antecedentes familiares de haber padecido cáncer de mama, pues se está en peligro de tenerlo. 

Y dio a conocer los factores de riesgo: Inicio de la menstruación antes de los 12 años; ausencia de embarazo y lactancia; ser mayor de 40 años; primer embarazo después de los 30 años de edad; obesidad; antecedentes familiares de cáncer mamario, entre otros.

En cuanto a los síntomas, Hernández Lobato comentó que cuando el cáncer tiene un tamaño menor a 1 centímetro sólo puede detectarse por el estudio de mastografía; cuando tiene un tamaño mayor y, por tanto, la enfermedad ha avanzado, muchas veces es posible “tocarlo” con los dedos.

Los casos avanzados –agregó- pueden ocasionar crecimiento o deformidad de la glándula mamaria, desviaciones del pezón y sangrado a través de él, o incluso la aparición de úlceras en la piel que cubre la glándula, las cuales son de difícil tratamiento.

Finalmente refirió que cuando el tumor mide menos de 1 centímetro puede curarse con su extracción por cirugía; sin embargo, los casos avanzados, sobre todo los que tienen más de 2 centímetros, requieren  cirugías mutilantes de uno o ambos senos.

Del total de los carcinomas de mama, menos del 1 % ocurren en varones, señaló el subdelegado Médico del ISSSTE al señalar que el Día Internacional del Cáncer de Mama se celebra el 19 de octubre, mismo que tiene como objetivo sensibilizar a la población general acerca de la importancia que esta enfermedad tiene en el mundo industrializado. Mantengamos la lucha contra el cáncer de mama no solo en octubre, sino de por vida, para la vida, puntualizó.