La noche fría en Saltillo no impidió que la afición asistiera al coso Fermín Espinosa “Armillita” para presenciar la corrida nocturna en la que participarían tres toreros de Aguascalientes.

Macías se llevó las dos orejas a un toro de regalo de la ganadería de Guadiana que llevó por nombre “Gallo” y como el auténtico gallo de Aguascalientes Macías salió a pelear las palmas. 

El buen astado de Don Armando Guadiana permitió al torero hidrocálido eslabonar una faena que calentó los corazones saltillenses. La labor la inició con verónicas armoniosas y remate con media, luego para hacer honor a la tierra del maestro Fermín, quitó por saltilleras ajustadas. 

Armado con  la tela roja se fue a los medios para comenzar de rodillas mientras la emoción iba creciendo. Ya de pie se dio gusto al torear por ambos lados con candencia y ritmo en tandas que tuvieron como respuesta los olés de la afición y las notas de la popular canción de su tierra “La pelea de gallos”. Para cerrar una buena labor mató de estocada entera y las dos orejas a sus manos.

La faena del primero fue un quehacer muy aseado, Macías se vio fino en sus procedimientos, tras el uso de las espadas el toro tardó en caer y el de Aguascalientes escuchó palmas.

Con el segundo de su lote Macías realizó una labor de sentimiento, entrega y valía, luego de dejar la estocada el juez de plaza negó el trofeo llevándose tremenda bronca. Macías fue invitado por la afición a dar la vuelta al ruedo en tres ocasiones.

Ficha del festejo

Tres cuartos de aforo en la plaza Fermín Espinosa “Armillita” de Saltillo, Coahuila. Se lidiaron toros de Guadiana bien presentados y manejables. Destacaron el segundo de la tarde y un toro de regalo.

Arturo Macías: Palmas, vuelta al ruedo y dos orejas
Joselito Adame: Dos orejas  y silencio.
Arturo Saldivar: Silencio en ambos
Al final del festejo Macías y Adame salieron en hombros de la afición saltillense.