Se avecina “el colapso” del transporte público en el corredor de la 11 Norte- Sur si se retiran las más de 240 unidades de 14 derroteros de un día a otro, advirtieron concesionarios —a unas horas de la promesa del arranque la línea dos de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA)—, quienes viven en total incertidumbre sobre su futuro.
Para los concesionarios este sería el plan del gobierno estatal, “exterminarlos de un golpe”, lo que dejaría sin transporte a miles de personas.
Este martes, por primera ocasión, concesionarios de dicho corredor hablaron ante medios de comunicación para informar sobre la incertidumbre que viven ante la total opacidad del gobierno de Puebla sobre el proyecto de la línea dos de la RUTA.
La rueda de prensa se efectuó luego de una reunió al sur de la ciudad de más de treinta concesionarios, quienes encabezados por Delfino Reyes Bocardo y Miguel Ángel Aceves Mendoza mostraron su preocupación e inconformidad.
Reyes Bocardo, uno de los mayores concesionarios en Puebla, tomó la batuta para responder los cuestionamientos de la prensa, a quienes reconoció que tienen miedo de que les quiten no sólo las concesiones, sino hasta la libertad.
“No sabemos cuál va a ser la actitud de la autoridad, se dice que va a iniciar en breve (la línea dos de RUTA) ¿pero cómo se va a iniciar si estamos trabajando?, ¿cómo se va a iniciar si no conocemos el sistema?, nos preocupa como ciudadanos y como servidores de la ciudadanía que al rato se nos culpe de errores, de falta de logística y que digan que el transportista es el que está saboteando el servicio y todo el mundo contra los transportistas”, señaló Reyes Bocardo
Y comparó que ahora un pasajero no tarda dos minutos en abordar una unidad al circular por la avenida 11 Norte-Sur las 14 rutas, lo que va a ser difícil que se iguale. “La gente tiene una gran diversidad de rutas para llegar a su destino.
”Nosotros vamos a tratar de seguir dando el servicio como lo estamos dando, dependiendo de las condiciones que se vayan dando”, dijo, “para evitar justamente el colapso”.
 
Zozobra y hostigamiento


Señaló que esta situación, la están viviendo más de 300 concesionarios a quienes se les negó toda información e inclusive su participación en el proyecto.
Indicó que detrás de ellos existen más de mil 500 familias que dependen de la circulación del RUTA, sin contar a los más de 100 mil pasajeros que dan servicio diariamente las 240 unidades de 14 líneas o rutas.
“Los que no cambiaron y no quieren entrarle al proyecto quedan fuera de la jugada”, dijo Delfino Reyes, al señalar que fue lo que les sentenciaron las autoridades en diciembre.
Explicó que ya existe un SAPI, conformado por diferentes concesionarios que trabajan de manera independiente de Galgos y Mayorazgo, alrededor de 20 personas que si quisieron conformar para justificar la conformación del nuevo sistema de transporte.
No obstante, indicó que conformaron diferentes trabajos para protegerse legalmente, como es la vía del amparo, pero hasta que no les quiten las concesiones no podrán proceder ante la justicia federal. “No podemos bautizar al niño sino ha nacido”, dijo.
—¿Han sido hostigados?
—El tener sesenta vehículos encerrados, aún cuando había un pacto. Sentimos que si es hostigamiento de la autoridad.
Reiteró que oficialmente no les han dicho que se tengan que retirar, por lo que “oficialmente” no se han sentido agredidos.
—¿Y extraoficialmente?
—Extraoficialmente se nos ha comentado que ya viene el asunto; intégrense, pero no informan a qué, no nos dicen que vamos a ganar, esto es un negocio, independientemente de que es social, político y ecológico.
Añadió que los acercamientos fueron en todo momento con la secretaría de Transportes, sin que hubiera pláticas con Mata Temoltzin.
“Definitivamente que si se hace esto de ‘big bang’ y nos desaparecen, tendrá que haber un colapso, porque si el servicio que se pretende dar de BRT tiene un origen de destino, pero no todo el flujo de pasajeros está sobre la avenida principal”, añadió.
Explicó que el BRT no significa un tipo de camión o autobús, sino vehículos de tránsito rápido con orden, como se usa en distintas partes del mundo. Por lo tanto, dijo que no es una solución, sino una alternativa de transporte por economía.
Señaló que han logrado informarse están listas más de 50 unidades para brindar el servicio el próximo 26 de febrero, fecha en la que se tiene previsto el arranque oficial del servicio de RUTA ante el arribo del presidente Enrique Peña Nieto.
Reyes Bocardo señaló que se sienten defraudados, al sostener que los mantienen en el engaño, porque funcionarios de la Secretaría de Transporte, desde el inicio del proyecto de RUTA, les dijeron que los sumarian con unidades sin la necesidad de que fueran nuevas; posteriormente, les argumentaron que los que no tuvieran unidades nuevas no sería posible su incorporación.
“No sabemos cuál va ser la actitud de la autoridad, como van a iniciar operaciones la segunda línea. Si estamos trabajando, nos preocupa porque no conocemos como va ser el sistema, nos preocupa como ciudadanos y servidores de la ciudadanía porque van a culpar al transporte público de los errores o falta de logística al quedarse sin transportes, y después se diga que se está saboteando el servicio”, subrayó.
Indicó además que existen grandes deudas de los concesionarios, debido a que un autobús tiene un costo de un millón 250 mil pesos, algunos de los cuales aún se están pagando.
“No sabemos qué va a pasar con nosotros, con mil 500 gentes que trabajan en esta área, cada vehículo tiene directamente a cuatro personas trabajando”, dijo.
—¿Qué va a pasar el jueves que supuestamente inicia el RUTA?
—No queremos adelantar vísperas, no queremos que se interprete como un enfrentamiento con la autoridad, jamás ha sido eso, jamás hemos estado en contra del proyecto, lo único que pedimos es claridad para saber a que nos estamos metiendo, por lo que considero que nos puede llevar esto al quebranto.