La escritora mexicana Sor Juana Inés de la Cruz, quien es considerada la máxima exponente de la literatura hispanoamericana del siglo XVII, será recordada con diversas actividades, este 17 de abril, que se cumplen 320 años de muerte.
En la Universidad del Claustro de Sor Juana (UCSJ) este jueves se depositarán los restos de la Décima Musa y se realizará la lectura de la “Oración fúnebre a Sor Juana Inés de la Cruz”, de Octavio Paz (1914-1998).
Juana Ramírez de Asbaje escribió numerosas composiciones entre ellas loas, redondillas liras y sonetos como “Detente, sombra de mi bien esquivo” y “Hombres necios que acusáis”.
Su fecha de nacimiento ha sido un tema muy discutido, sin embargo la UCSJ cita que vio la primera luz el 12 de noviembre de 1651, aunque aún haya fuentes que fijen la fecha en 1648.
Vivió sus primeros años de vida en el Estado de México con sus abuelos maternos entre 1655 y 1657, en este último año escribió su primera loa al santísimo Sacramento, de acuerdo con el portal “www.biografíasyvidas.com”.
La poeta se mudó a la casa de su tía, en la capital, donde tomó lecciones de gramática latina con el bachiller Martí Oliva, en 1665 ingresó a la Corte Virreinal y dos años después entró al convento de San José de carmelitas descalzas, que ese mismo año lo abandonó.
Juana a sus 17 años de edad se integró como novicia al convento de San Jerónimo y en 1669 profesó como religiosa para este convento en el que pasó aproximadamente 27 años, menciona la página en Internet de UCSJ.
Tiempo después ingresó a la Corte Virreinal como dama de honor de Leonor Carreto, esposa del virrey Antonio Sebastián de Toledo. Apadrinada por los marqueses de Mancera, brilló en la corte por su erudición, su viva inteligencia y su habilidad versificadora.
En 1676 se publicó alguno de sus villancicos, mientras que en “La Inundación Castálida” (1689) se mostró la mayor parte de su obra en Madrid, España
Más tarde escribió las comedias de teatro “Los empeños de una casa” y “Amor es más laberinto” en la cual colaboró Juan Guevara.
Posteriormente, en 1691, Sor Juana Inés de la Cruz escribió la “Carta Atenagórica” en la cual utilizó utiliza el seudónimo Sor Filotea de la Cruz, y contestó un sermón del padre portugués Antonio Vierya donde replicó las finezas de Cristo.
Un año más tarde escribió “El sueño”, poema filosófico que consta de 975 versos, al que le siguió un segundo volumen de sus obras y “Enigmas para la casa do placer”, escrito entre 1692 y 1693.
El 8 de febrero de 1694 Sor Juana Inés ratificó sus votos religiosos, pero el 17 de abril de 1695, a las tres de la mañana, murió víctima de la enfermedad epidémica de la época, el tifus.