La activista nacional contra la trata, Rosy Orozco, condenó y calificó como indignante que una menor de edad haya declarado sola ante las autoridades del Ministerio Público (MP), luego de que estaba desaparecida, presuntamente víctima de trata.
La dirigente de la Comisión de Unidos Contra la Trata A.C., en entrevista telefónica a Intolerancia Diario, señaló que se comunicará co0n el procurador de justicia de Puebla, Víctor Carrancá Bourget, para que se esclarezca la situación.
Este medio en una investigación del periodista Mario Martell reveló que después de una semana desaparecida, una menor de 13 años de edad, fue obligada a rendir su declaración ante el Ministerio Público de Huauchinango sin presencia de sus padres ni abogados, quienes se encontraban en la ciudad de Puebla denunciando el rapto.
Indicó la activista que dialogarán con las autoridades para que la joven tenga atención psicológica y pueda tener la confianza de ver lo que realmente está pasando.
Incluso se comprometió a vincular a la afectada a Casa Anthaus, primer refugió para víctimas de trata operado por el gobierno estatal y sociedad civil.
Rosy Orozco, señaló que muchas veces las adolescentes salen de su hogar por razones de la edad de que no las comprenden o desintegración familiar y violencia.
“Estas situaciones las ponen muy vulnerables con tipos como este, lo que ustedes (Intolerancia Diario) están documentando es que tiene antecedentes y todo el mundo lo sabía, me parece terrible”, señaló
Dijo que la situación empeora porque supuestamente tiene a más jovencitas viviendo con él.
“”La autoridad debe hacer una investigación profunda y primero proteger a la menor, nunca debió haber estado ante la autoridad sin sus padres, sin derechos humanos y sin abogados”, dijo.
La menor despareció el 21 de octubre después de que una de sus vecinas de 14 años de edad la invitó pasar a su casa, donde vive con un señor de nombre Neftalí Ortiz Gómez.
La madre de Leticia, Silvia García, alcanzó a ver como su hija ingresaba al domicilio cuando se dirigía a su escuela secundaria.
En ese momento los padres de la adolescente acudieron al Ministerio Público de Huauchinango, sin que las autoridades hicieran caso a las denuncia por rapto contra Neftalí, a quien se conoce en la localidad por tener como parejas a jovencitas no mayores de 16 años y por ser un presunto tratante de blancas.
“Nunca debió la autoridad de permitir que declarara siendo una niña, vamos a platicar con las autoridades para ver qué está pasando”, dijo la también ex diputada federal.
Confió en la sensibilidad del procurador Carrancá Bourget, quien debe buscar la verdad, dijo.
Añadió que aunque Puebla es considerada a nivel nacional como la tercera mejor entidad en el combate de la trata de personas, no dudó que aún  haya autoridades o mal capacitadas o coludidas.
“Es bueno que el procurador conozca el caso a fondo, tengo la confianza tanto en él como en Rodríguez Almeida (Secretario de Seguridad Pública Estatal) con quienes tuvimos muchos avances y éxitos”.
Finalmente hizo un exhorto a los padres de familia para que dialoguen con sus hijos y eviten todo tipo de violencia, porque para todos estos jóvenes salirse de su casa es muy peligroso.
La desaparición
Este miércoles, a una semana de la desaparición de Leticia Cruz, el Ministerio Público de Huauchinango señaló que la menor apareció y que al filo de las nueve de la noche estaba rindiendo su declaración, aunque en ese momento sus padres se encontraban en la ciudad de Puebla denunciando la desaparición de su hija ante la delegación de la Procuraduría General de la República (PGR).
Posteriormente desconocidos llamaron por teléfono a los padres de Leticia Cruz García para señalar que versiones periodísticas del municipio indican que la niña fue hallada por un policía auxiliar, y que se había ido de su casa por presunto maltrato.
Otra anomalía es que al momento en que Leticia Cruz García rindió su declaración se impidió al tío de la estudiante de secundaria estar presente, por lo cual se teme que las autoridades ministeriales traten de inculpar a los padres por violencia intrafamiliar en lugar de indagar al posible captor, quien vive con Erika de 14 años y Michel de 15 años.
Al cierre de la edición los padres estaban siendo atendidos por personal de la PGR especializados en delitos sexuales, esto después de acudir a la Comisión Derechos Humanos-Puebla (CDH) para solicitar medidas cautelares para la menor y la familia.