A cuatro semanas de que el papa Francisco realice su primera visita pastoral a tierras mexicanas, trabajadores del Gobierno del Distrito Federal refuerzan labores para remozar los alrededores de la Nunciatura Apostólica de México.

A pesar del clima que ha afectado en particular a la Ciudad de México, se pueden ver cómo decenas de trabajadores laboran arduamente en los últimos días sobre la acera de la Nunciatura que está en la calle de Su Santidad Juan Pablo II, así como en avenida Manuel M.Ponce.

Durante un recorrido de Notimex por el lugar, se pudo apreciar la presencia de por lo menos tres grúas con la que los trabajadores se asisten para podar las partes altas de las enredaderas que bordan la Nunciatura para asegurar una adecuada iluminación.

Lo mismo ocurre sobre el camellón de Manuel M. Ponce, donde jardineros del Gobierno del Distrito Federal remozan la vegetación plantando flores y plantas de ornato nuevas.

Dichos trabajos se realizan de manera discreta y hábil para evitar que en la zona resulte afectado el tránsito local, en particular en horas pico, ya que se trata de una de las más transitadas, al sur de la capital.

Frente a la nunciatura, no faltan los vecinos curiosos que aprovechan que sus ventanas en la esquina de Lerdo de Tejada y Juan Pablo II dan hacia la sede para apreciar el movimiento que se registra en el lugar con motivo de la visita del Sumo Pontífice.

Lo mismo ocurre con quienes acuden a la Nunciatura, no se reservan la emoción y comentan “están arreglando por la visita del Papa”, como lo expresa una monja que espera a que le den acceso a la sede diplomática del Vaticano.

De igual forma, el monumento en honor a San Juan Pablo II, ubicado en el camellón de Insurgentes Sur justo enfrente de la parada del Metrobus París, luce limpio y a sus pies se encuentran un discreto vaso con flores frescas, colocadas tal vez por algún transeúnte.

Por otra parte, entre los peatones hay quienes esporádicamente voltean a ver el lugar, el cual en los últimos días ha tenido mucho movimiento, según lo comenta don Joaquín, portero de uno de los edificios ubicados en Manuel M. Ponce.

No faltan quienes desconocen que este lugar se ubica la sede diplomática del Vaticano y donde el Papa descansará a su llegada y mientras se encuentre en la Ciudad de México, por lo que las labores les son indiferentes.

Jorge Mario Bergoglio llegará al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México por la tarde-noche del viernes 12 de febrero, luego de lo cual se prevé que haga una visita de cortesía al presidente Enrique Peña Nieto, al día siguiente.

Durante su estancia en el país, programada del 12 al 17 del próximo mes, el Obispo de Roma visitará también las entidades de Chiapas, Chihuahua y Michoacán.

La Nunciatura Apostólica en México es una de 120 representaciones diplomáticas y consulares del Vaticano en el mundo.