Con motivo del Día Mundial de la Bicicleta que se celebra el 19 de abril, expertos detallan que aproximadamente el 70 por ciento de la población en Puebla no cuentan con un automóvil por lo que sería vial ver a la bicicleta como una buena opción de transporte, evitando contaminación e incentivando el deporte. 

Alejandro Pérez Villaseñor, especialista en medio ambiente y director de la carrera de Ingeniero Industrial del Tecnológico de Monterrey en Puebla, expresó que aun cuando se ha trabajado en la capital Poblana por la inclusión de ciclovías, se tienen que triplicar esfuerzos para verlo como un medio que ayude a la disminución de contaminación y fomento en el deporte.

Ya se cuentan con zonas en las cuales se ha hecho un esfuerzo importante por parte del Gobierno de Puebla en el que se han incluido espacios para el ciclista, caso de la ciclo vía de la Atlixcayotl.

El catedrático explicó que es necesario conectar las ciclovías a otras vialidades para tener un mayor abarcamiento, además recomendó que es necesario trabajar en concientizar al automovilista y promover el uso de bicicletas en distancias cortas.

“No podemos decir que Puebla es un ciudad en la cual es factible el uso de la bicicleta por ahora, pues en poco tiempo lo necesario para que se convierta en una ciudad con este tipo de movilidad podría funcionar con el simple hecho de darle un espacio al ciclista”, dijo Pérez Villaseñor.

Por su parte, Talía González Cacho urbanista y catedrática del Departamento de Arquitectura del Tec de Monterrey en Puebla añadió que el que una ciudad sea adecuada para transitar en bicicleta tiene que ver mucho más con la educación vial de los automovilistas. Además de acatar el reglamento vial, y tener un mayor ordenamiento de la vía pública.

“Y es que es necesario tener un mayor ordenamiento del transporte público integral, transporte privado y respeto por la bicicleta”, comentó Gonzáles Cacho.

Y es que se tendría que trabajar en espacios como estacionamientos para bicicletas, incentivos en el trabajo por llegar en ellas,  tal vez, se volvería con mayor facilidad un transporte cotidiano.

Su uso, no sólo tendría que ser una herramienta de distracción sino más bien tendría que ser visto como un medio de transporte el cual trae más beneficios que problemas, tales como; la disminución del tráfico, ayuda a combatir el estrés, baja los niveles de contaminación, tiene impacto en las finanzas e incrementar la salud de las personas por medio del ejercicio.