La entrada en vigor del Nuevo Sistema de Verificación Vehicular dejó al descubierto la corrupción que se dio en la entrega de las concesiones a los verificentros que monopolizan este servicio.

Resulta que tras la entrada en los nuevos sistemas de verificación en los estados que incluyen la Megalópolis, la Profepa clausuró a dos verificentros suspendidos de manera definitiva en la Ciudad de México.

El verificentro 2105, que opera en la colonia Maravillas, y el 2110, que su ubica en San Martín Texmelucan, propiedad de las empresas Verificadora Tamaulipas y Verificentro San Joaquín, respectivamente.

Lo que demuestra que la concesión que obtuvieron en  2014 para operar en Puebla, fue otorgada a pesar del historial negativo que arrastraban desde la tenían desde la Ciudad de México.

El pasado fin de semana, la Profepa colocó sellos de clausura en las líneas de los Centros de Verificación ubicados en Calzada Ignacio Zaragoza (2105), Avenida 25 Oriente, Bulevar Atlixco y en el municipio de San Martin Texmelucan (2110).

Tras la clausura realizada por la Procuraduría Federal de Protección al ambiente a diferentes líneas de centros de verificación, mejor conocidos como “verificentros”, los 17 instalados que operaban en el estado trabajaron en la ilegalidad desde su apertura una vez que no cumplieron con lo establecido en la convocatoria y algunos de ellos incluso debió negárseles la concesión en la solicitud ya que registraban situaciones irregulares operando en otros estados.