En una ceremonia luctuosa, a la que se dieron cita exgobernadores, gobernadores, secretarios de estado y hasta la titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Olga Sánchez Cordero, -en representación del presidente Andrés Manuel López Obrador, despidieron los restos mortales de Rafael Moreno Valle y Martha Erika Alonso. 

Tras el minuto de silencio, Luis Banck Serrato, Jefe de la Oficina del Ejecutivo, orador oficial del evento que se realizó en la Plaza de la Victoria. Además de agradecer, a nombre de los deudos, la presencia de los asistentes, sostuvo que “en los 217 municipios del Estado existen personas que de todo corazón los invitaban a comer”.

El exalcalde capitalino recordó que el matrimonio estaba próximo a cumplir 15 años de estar juntos y destacó que el “entendimiento” entre ambos era tal que una “sonrisa o un chiflido” lograban comunicarse. 

Tanto “Rafael”, como “Martha”, a decir de Luis Banck adoraban a sus respectivos padres y destacó que “Martha Erika era tan niñera” que en cualquier lugar que se apersonaba, las niñas eran las primeras que se le acercaban.   

 


 

“Martha Erika defendió el triunfo de los poblanos”, dijo antes de que su voz se entrecortara. Para cuando recuperó la palabra, lanzó el grito de batalla durante el proceso jurídico y electoral: “Martha Gobernadora”.

“Exigimos una investigación que no deje lugar a dudas sobre las causas del accidente”, insistió antes de agradecer la presencia de la representante federal, Olga Sánchez Cordero y exigir a gritos “Justicia”. 

“Los abrazamos hasta que pronto los volvamos a encontrar”, fue el mensaje con el cual cerró su discurso, mientras los gritos de “justicia” fueron acallados con un “suplicamos respeto a los presentes”

Instantes después comenzaron las guardias de honor y finalmente el Himno del Estado de Puebla.