Sin querer revelar las líneas de investigación, el fiscal General, Gilberto Higuera Bernal, indicó que las autoridades estatales y federales realizan las pesquisas para esclarecer la muerte de cinco personas en la caída del helicóptero en el que se transportaban Martha Erika Alonso Hidalgo y Rafael Moreno Valle Rosas.

Señaló en entrevista, en los predios donde cayó la aeronave en Coronango, que trabajan en coordinación para colaborar en las investigaciones y determinar las causas del accidente.

Para fortalecer las indagatorias, llegaron la mañana de este viernes peritos canadienses a los terrenos donde quedaron los restos del helicóptero, confirmó Higuera Bernal.

El fiscal señaló que cada una de las dependencias, tal es el caso de la Procuraduría General de la República (PGR), como la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE), realizan las indagatorias por separado.


 

Sin dar mayores detalles, precisó que han avanzado en las diligencias y aclaró que en estos momentos los peritos canadienses, país de origen del motor de la aeronave, se encargarán de revisar, inspeccionar y de levantar los restos del helicóptero.

Asimismo, el funcionario estatal, argumentó que el equipo de Candá apoyará en la revisión y estudios técnicos, para saber qué fue lo que ocurrió. 

Higuera Bernal detalló que cada dependencia lleva su carpeta de investigación y van avanzando de manera importante y al final se definirá la competencia, es decir si se turna a la PGR. Por lo tanto, dejó en claro que Puebla va a investigar todo lo necesario para esclarecer el hecho. 

Sobre las causas que pudieron haber provocado el desplome e incendio de la aeronave, el fiscal puntualizó que eso es un trabajo de los peritos, a quienes acompañarán hasta el retiro de la aeronave siniestrada.

Al ser cuestionado sobre si el desplome pudo tratarse de un atentado, el fiscal fue prudente y explicó que toda investigación se guía por los indicios que se encuentran y se estudian, pues se sigue una ruta. 

Indicó que en la parte de la aeronáutica son las autoridades especializadas las que tendrán que determinar las causas que provocaron la caída del helicóptero la tarde del 24 de diciembre en Santa María Coronango. 

Afectado

Mientras tanto, en entrevista también en el terreno, Reynaldo Coyotecatl, propietario del predio donde se impactó la aeronave, señaló que espera que le paguen la indemnización por los daños que calcula en medio millón de pesos.

El campesino cuenta con 60 años de edad y relató que adquirió las tierras de cultivo en el año de 1972, cuando aún se producían manzanas.

Reynaldo había pensado en heredar este terreno de 23 metros de ancho y 390 de largo, el cual se ubica en el paraje conocido como “El Mirador”, en el municipio de Santa María Coronango, a una de sus hijas.

Además de dedicarse al campo, conduce un vehículo del transporte público y realiza otros oficios, refirió al señalar que, a través de la televisión, se enteró del accidente que cobró la vida de la gobernadora y el senador de Puebla.

“No le hice mucho caso, seguí trabajando y como a la una de la tarde me llamó la atención porque allá bajó un helicóptero. Tomé mi bicicleta y me fui y pues ya miré, estaba en todo mi terreno y la verdad quiero que se me paguen los daños”, dijo.

Indicó que el zacate quemado es muy valioso para ellos, ya que lo da a comer a sus borregos.

“Ahora una bolsa tiene un precio de 30 pesos y es muy caro. Imagínese si ese zacate lo quería yo para todo el año, para que coman mis animales, ahora voy a tener que comprar”, dijo.