Los equipos de rescate dieron esta noche un saldo de al menos 40 víctimas mortales y más de 250 desaparecidos tras finalizar las búsquedas de hoy para encontrar más supervivientes por el rompimiento de los diques de un depósito de residuos mineros en el sureste de Brasil.
   
El Cuerpo de Bomberos y la Defensa Civil finalizaron a las 20:00 horas las tareas de rescate, que serán retomadas mañana domingo a partir de las 04:00 horas de la mañana.    
   
El gobierno del estado de Minas Gerais, donde ocurrió la tragedia, elevó esta noche a 40 el número de muertos, de los que apenas ocho han sido identificados.

Por otra parte, la minera brasileña Vale señaló que al menos 256 empleados aún permanecían en paradero desconocido, aunque el número de desaparecidos podría ser mayor porque el mar de barro arrasó una posada en la región, además de varias viviendas.

Al menos 81 personas tuvieron que ser evacuadas de sus viviendas, mientras que otras 23 fueron trasladadas a hospitales.

La ruptura de la represa de la empresa Vale, la mayor exportadora de hierro del mundo, ocurrió el viernes por la tarde en Brumadinho, región metropolitana de Belo Horizonte, capital de Minas Gerais, cuando por causas desconocidas, los diques se rompieron y provocaron un mar de barro que arrasó las proximidades.

El número de víctimas supera ya el de una tragedia similar ocurrida en noviembre de 2015, cuando los diques de contención de un gran depósito de residuos mineros en la localidad de Mariana, a pocos kilómetros de distancia de Brumadinho, dejó 18 muertos y un desaparecido.

El depósito ubicado en Mariana era propiedad de Samarco, una filial de Vale, y de la anglo-australiana BHP, cuyo vertido de 62 millones de metros cúbicos de barro y residuos era considerada la peor tragedia ambiental en la historia de Brasil, al contaminar la zona y el río Doce, uno de los principales afluentes del país y cuya fauna y márgenes resultaron afectados.

Vale fue multada hoy por el gobierno brasileño con 250 millones de reales (unos 66 millones de dólares) por el rompimiento ocurrido ayer viernes, mientras que en los similares hechos de 2015, fue multada con 345 millones de reales (90 millones de dólares).