Los equipos de rescate elevaron a 165 el número de fallecidos por el rompimiento de los diques de contención de un depósito de residuos mineros en Brasil el pasado 25 de enero, mientras que 160 personas siguen desaparecidas.

Según divulgó el Cuerpo de Bomberos, las búsquedas de los desaparecidos continuaron este domingo, con la ayuda de 11 aeronaves y 35 máquinas excavadoras, además de 352 militares, 64 miembros de la Fuerza Nacional y nueve voluntarios.

Los trabajos se concentran en el área administrativa de la minera Vale, donde había el comedor, una casa y el estacionamiento.

La catástrofe, considerada ya una de las peores de la historia de Brasil, se produjo el viernes 25 de enero en el municipio de Brumadinho (región metropolitana de Belo Horizonte, capital regional de Minas Gerais), cuando los diques de contención de un depósito se rompieron y provocaron el vertido de 13 millones de metros cúbicos de barro y lodo, que arrasaron todo lo que encontraron en su paso en un radio de varios kilómetros.

Una comunidad cercana, el centro administrativo de Vale y el comedor, en el que había centenares de personas en aquel momento, fueron anegados por la alud de barro y residuos.