Ante los graves pecados del crimen, secuestro y narcotráfico que acentúan los elevados índices de violencia existentes al seno de Puebla, del estado y en todo México, se debe de luchar para erradicar esos quebrantos sociales, advirtió el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa en su mensaje de la XXVIII edición de la Procesión de Viernes Santo, además puntualizó que el trabajo unido, será el antídoto para devolver la paz y estabilidad social a los ciudadanos.
Un par de minutos antes de que poco más de 180 mil feligreses y visitantes comenzaran el recorrido por las principales calles del Centro Histórico de la Angelópolis, monseñor reiteró que esta etapa de las fiestas de Pascua contribuirán en la eliminación de los males sociales.
Se están viviendo, subrayó, momentos muy difíciles en territorio nacional que necesitan del apoyo de todos, transitando por la senda de la rectitud para comenzar a transformar el panorama social.
Foto: Cristopher Damián
Los momentos de incertidumbre, especificó, disminuirán cuando el trabajo de toda la comunidad se note en un trabajo transparente cotidiano.
Sánchez Espinosa espera que en estos días de la Pascua y de reflexión se transformen en el antídoto para erradicar la violencia, factor común, en territorio nacional.
“Son pecados la violencia, narcotráfico y el secuestro, son situaciones que estamos viviendo y son pecados graves, pues hay que luchar para erradicarlos de la sociedad”, refrendó.
Oraciones a la imagen del Niño Doctor de Tepeaca, debutante en la Procesión de Viernes Santo, seguramente contribuirán al igual que las realizadas a las de El Señor de Las Maravillas, la Virgen de Los Dolores, la Virgen de la Soledad, Padre Jesús y a Jesús Nazareno de Tepeaca.
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Foto: Cristopher Damián
"Ojala estas fiestas de la Pascua, nos inviten a erradicar la violencia que tanto estamos sufriendo El Señor de Las Maravillas, la virgen de Los Dolores, La Soledad, Padre Jesús, Jesús Nazareno, y el Niño Doctor de Tepeaca".
“Estamos viviendo momentos difíciles, pero debemos luchar para erradicar esos males para que podamos salir de este problema”.
Reiteró que desde todas las trincheras se deberá trabajar para fortalecer la paz social, unir voluntades para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
El corazón de Jesús unifica criterios, puntualizó, sin importar condiciones sociales ni ideológicas ni de diversas formas de pensamiento.
Durante las estaciones de Viacrucis celebrado al interior de la Catedral previo a la Procesión de Viernes Santo en donde los participantes registraron un nuevo récord de asistencia al superar los 20 mil feligreses al interior y en el atrio, también realizó un llamado a toda la comunidad para que unida reestablezca la paz.
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Foto: Cristopher Damián
Víctor Sánchez Espinosa y Emilio José Baños Ardavín, rector de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), guiaron la procesión, pero desde la parte de atrás de la cofradía del Niño Doctor de Tepeaca, imagen que fue al frente de la procesión por representar la continuidad de la vida y el camino de la fe.
El alcalde de Tepeaca, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, también caminó y rezó al lado de Víctor Sánchez y Emilio José Baños.
Los cristianos caminaron a lo largo de la 16 de Septiembre hasta tomar la 2 Norte y alcanzar la 4 Oriente-Poniente para llegar a la 11 Norte, dirigirse al templo de nuestra Señora de Guadalupe en donde monseñor aseguró que hoy es un día de luto para los cristianos por la muerte de Jesucristo, pero su cruz es un signo de vida, de un árbol frondoso que se ha esparcido por todo el globo para redimir al hombre.
“Si el cordero del hombre vive en el cielo inmolado, pero de pie, también su corazón comparte el mismo estado; es un corazón traspasado pero viviente; eternamente traspasado, precisamente porque está eternamente vivo por nosotros”.
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Foto: Cristopher Damián
Pura fe
De las cinco imágenes cargadas por la Cofradía de Nazarenos, la del Señor de Las Maravillas fue la más venerada y aclamada a su paso por las calles del corazón de la Angelópolis. Pero la del Niño Doctor de Tepeaca también mostró músculo no solo por más de mil porteadores que llegaron de ese municipio sino por la devoción mostrada por hombres y mujeres, algunos de ellos no contuvieron el llanto, al ver pasar la pequeña figura, pero un gigante al momento de obrar milagros.
Las imágenes de la Virgen de la Soledad, Jesús de las Tres Caídas de Analco, Virgen de los Dolores de El Carmen, El Señor de Las Maravillas y Padre Jesús Nazareno de San José a su paso por las calles encontraron un fervor invaluable, los creyentes cantaron coplas sevillanas, desde los balcones de las milenarias casas coloniales de la metrópoli como muestra de una fe que se mantiene viva en su corazón a pesar de los embates ideológicos dirigidos por las autoridades.
Las imágenes que participan en la procesión de Viernes Santo corresponden al año 1595 hasta fines del siglo XVIII, recordó el arqueólogo Eduardo Merlo Juárez.
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Foto: Cristopher Damián
El catedrático de la UPAEP, precisó que la Procesión de Viernes Santo que se desarrolla desde su época moderna en la Angelópolis desde hace 28 años, ya tiene más relevancia a las realizadas en Iztapalapa y San Luis Potosí, incluso, el número de participantes es mayor, indicó.
Sánchez Espinoza en su segundo mensaje en el que pidió a los fieles católicos acompañar a Jesús en este Viernes Santo, que representa la muerte y crucifixión del hijo de Dios hace más de dos mil años.
“Meditemos en estos cánticos, árbol noble y esplendido es dulce el fruto que nos dio; sigamos procesionando, meditando y orando en estos misterios que hoy viernes santo la iglesia celebra y nosotros juntamente con ella”.
La procesión avanzó por la Avenida Reforma hasta llegar a la 16 de Septiembre para dar vuelta y concluir en el atrio de la Catedral a las 15.00 horas con la bendición del arzobispo Sánchez Espinosa.
No la contaminaron
Los políticos que buscan la gubernatura respetaron a los feligreses y visitantes, al no promocionarse ni enviar a sus equipos de campaña.
