El Partido Revolucionario Institucional (PRI) anunció su respaldo al gobierno de Luis Miguel Barbosa Huerta para que se investigue la deuda de 44 mil millones de pesos heredada principalmente por la administración de Rafael Moreno Valle, misma que debe ser pagada por los poblanos.

El presidente del Comité Directivo Estatal, Lorenzo Rivera Sosa precisó que el partido avala la llegada de un nuevo gobierno al estado de Puebla, después de la trágica muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo, cuyo caso aún está sin resolverse y esperan que haya transparencia.

Advirtió que los exmandatarios  Rafael Moreno Valle Rosas y Antonio Gali Fayad, dejaron una deuda oculta para el estado que terminará por ser absorbida por las familias poblanas y que, la semana pasada, el propio gobernador en su toma de protesta, Luis Miguel Barbosa Huerta, reveló que ascendía a los 44 mil millones de pesos.

El presidente estatal del tricolor sostuvo que el Revolucionario Institucional apoya la decisión del nuevo mandatario de investigar a fondo el compromiso financiero heredado por las administraciones anteriores y que se cumpla la ley en caso de que exista alguna irregularidad.

Indicó que lo importante es preservar el patrimonio de las familias poblanas y, por ello, es necesario que se conozca la deuda real y qué tanto afectará a los ciudadanos.

Rivera Sosa sostuvo que el PRI siempre estará a favor de que se cumpla la ley y se sancionen a los responsables de cometer algún ilícito a través de la administración pública.

El pasado jueves al rendir protesta como gobernador, Barbosa Huerta dijo que en Puebla no todo lo que se debe es legal, ya que se hicieron estrategias para ocultar la deuda, creando una estructura legislativa, económica, y antes de opinar nuevamente se van a integrar expertos se hará una auditoría a todos los compromisos contraídos.

Del monto al que asciende la deuda y las obligaciones que tienen, precisó que son 44 mil millones de pesos, “Puebla necesita saber la verdad”, insistió.

“Se ha instruido a la contraloría para llevar a cabo auditorías a gobiernos anteriores y si existen irregularidades se aplicará la ley. La reconciliación es la aplicación de la ley, no la evasión de la ley”.

Llamado a la participación priísta

En otro orden de ideas, la diputada local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Rocío García Olmedo, convocó a la militancia a participar en el proceso de elección de su próximo dirigente nacional para garantizar que el vencedor de la contienda contará con su respaldo y asumirá el cargo de manera legítima.

Dijo que a una semana que se lleve a cabo la elección interna para renovar el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), es necesario que los liderazgos del PRI dejen a un lado sus diferencias y cerrar filas para poder salir unidos así como fortalecidos de cara a la elección intermedia de 2021.

Sostuvo que existen las condiciones de libertad e imparcialidad para elegir, entre Alejandro Moreno Cárdenas e Ivonne Ortega Pacheco, quien será el responsable de conducir los trabajos de reconstrucción de este instituto político y enfrentar los retos del nuevo escenario electoral en el país.

“La convocatoria mis compañeros militantes del PRI es que acudan a votar, los que estén en esa lista actualizada y que tengan su credencial del partido que los acredite y creo que deberemos conocer en dónde se instalarán las casillas”.

García Olmedo expresó que incluso aquellos que han sido señalados como traidores del PRI podrán acudir a votar, si así lo deciden, porque no se ha emitido una resolución sobre los procesos de expulsión que inició su dirigencia estatal.

Para la elección interna del próximo 11 de agosto se instalarán en Puebla 586 mesas receptoras en los 217 municipios y los primeros resultados se comenzarán a publicarse alrededor de las cinco de la tarde comenzando a marcar una tendencia a favor de Moreno Cárdenas  u Ortega Pacheco.