El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, afirmó que varios países de la región, incluido Ecuador, enfrentan "serios intentos desestabilizadores" en el contexto de protestas sociales.

Así lo señaló en la inauguración de la VII Reunión de Ministros en Materia de Seguridad Pública de las Américas, acto organizado por el Ministerio de Gobierno de Ecuador y la Organización de los Estados Americanos (OEA).

"En esta ocasión la reunión transcurre en un momento muy difícil para la región. Varios de nuestros países enfrentamos serios intentos desestabilizadores, no a un gobierno, menos a un presidente, sino al Estado de derecho y a nuestra democracia", dijo Moreno.

El mandatario aludió así a las protestas registradas en América Latina, que derivaron en actos de violencia y crisis social.

Las protestas crecieron de forma sorpresiva y con enfrentamientos en Ecuador, donde del 3 al 13 de octubre pasados los indígenas y sectores sociales se manifestaron en contra de la eliminación de los subsidios a los combustibles, medida que luego fue derogada por el gobierno.

También Bolivia es foco de protestas por acusaciones de un supuesto fraude en la elección presidencial del pasado 20 de octubre, y en Chile por la desigualdad.

Moreno agregó que muchos de los países de la región "han heredado crisis provocadas por regímenes corruptos, que con políticas irresponsables y demagógicas han pretendido influir en la voluntad de nuestros pueblos".

Se refirió en especial al caso de Ecuador, donde se vivió recientemente "un momento de conflicto".

Moreno denunció ante el foro que en la protesta que realizó el movimiento indígena "lastimosamente se infiltraron grupos armados con protervos fines de desestabilización de la democracia".

Añadió que esos grupos "cometieron actos criminales" al referir al ataque que sufrieron las instalaciones de la Contraloría General del Estado durante las protestas.

El mandatario ecuatoriano apuntó que los que buscan generar el caos son grupos "antisistémicos que valiéndose de la violencia organizada pretenden volvernos al pasado resquebrajando nuestras democracias".

Frente a eso, Moreno, quien gobierna Ecuador desde mayo de 2017, recalcó que su administración practica el diálogo, la tolerancia, el respeto a los derechos humanos y la no confrontación.

Las recientes protestas sociales en Ecuador dejaron al menos 10 muertos, según la Defensoría del Pueblo, mientras que el gobierno reportó un saldo de 1.507 heridos y 1.330 detenidos.

Las manifestaciones fueron interpretadas, en su momento, por Moreno, como un intento de golpe de Estado.