A 50 años de la matanza de Monte de Chila en la Sierra Norte de Puebla, donde elementos del  ejército exterminaron  a 80 indígenas totonacas aunque la cifra que se maneja de manera extraoficial fue de 324, la gente opta por olvidar los hechos ocurridos durante el gobierno del general Rafael Moreno Valle.

De acuerdo a los testimonios que aún existen, como el del sacerdote Gabriel Diego que en 1970 escribió en el libro del gobierno de Chicontla, fue la busca de tierras la que generó el enfrentamiento entre pobladores y militares.

En el libro de Chicontla, escrito por puño y letra del sacerdote se puede leer: El 28 de enero llegó aquí  el Ejército Mexicano trayendo innumerables carros y toda clase de armas para ir a apaciguar una trifulca  que se había armado en el Monte de Chila el 24 de este mismo mes.

“Sucede  que desde hace varios días se venían cometiendo asesinatos de arrieros en esa ranchería, cosa que era insoportable, pues ya nadie se atrevía a pasar por temor a que los mataran”.

El sacerdote, único que dejó un testimonio oficial, señala que los rebeldes que se encontraban en la zona era mayor parte indígenas en busca de tierras; se habían establecido apropiándose grandes extensiones de tierras de los ganaderos de Bienvenido y Buenos Aires

“Pocos días antes ya se habían fugado de la  cárcel de Villa Juárez algunos centenares de hombres, yéndose a sumar a otros rebeldes, y fue cuando más al poco tiempo se registraron los asesinatos”.

“La gente pacífica fue quejándose ante las autoridades, quienes a los pocos días mandaron un pelotón de soldados con teniente muy estimado de Villa Juárez. Este seguía, cuentan quería arreglar las cosas pacíficamente y solamente capturar a los cabecillas principales y así fue como en una buena madrugada (a las 5 de la mañana se presentó ante ellos , pero luego respondieron con fuego, estos respondieron con fuego  matando al teniente y otro cabo, y dos soldados heridos. Por su parte los demás soldados mataron a cerca de 30 hombres rebeldes”.

“El 28 de enero bajó el ejército con varios generales, aquí estuvieron planeando  su ataque, para vengar  la sangre de sus hermanos”.

La mayor parte de los rebeldes huyeron pues tuvieron conocimiento por medio de espías que había llegado el ejército”.

“El ejército  salió al otro día 29, no se sabe cuántos fueron a matar todavía más dicen que  cerca de 80; los rebeldes fueron sitiados  por tierra y aire”.

“Esta ranchería se encuentra al oriente de Chicontla a dos horas de distancia y a medio camino entre Buenos Aires y Chicontla, antiguamente Monte de Chila era una selva virgen, ahora la mayor parte son potreros”, así concluyó el relato el sacerdote de Chicontla.

Más de 300 indígenas muertos

De acuerdo a la información más reciente la matanza de Monte Chila de Jopala, sierra Norte de Puebla el ejército mexicano exterminó a 324 indígenas totonacas, ancianos, mujeres y niños y quemaron sus pocas propiedades y dejaron los cadáveres 3 meses sin poder enterrarlos.

Quienes aún recuerdan el hecho señalan que la memoria de este triste acontecimiento es para que no se vuelva a repetir. Ni 2 de octubre del 68, ni 28 de enero del 70. Cuando están amenazadas muchas comunidades que defiende el agua y la tierra como lugares sagrados.

La primera matanza

De acuerdo a testimonios del periodista Manuel Sánchez Pontón, quien era director del periódico La Opinión, a finales de la década de los años 60, el general Rafael Moreno Valle llegó al Senado en 1952 cuando Adolfo Ruiz Cortines era candidato a la Presidencia de la República, y luego, en el gobierno de López Mateos, fue secretario de Salubridad y finalmente electo gobernador de Puebla para el sexenio 1969-75.

El testimonio del periodista que se publica en su red social señala: “Se creía que Moreno Valle iba a ser un mediano gobernador pero, 15 días después de haber tomado posesión, el 15 de febrero de 1969 ordenó una sangrienta masacre de campesinos en el pueblo de Huehuetlán el Chico, en la Mixteca poblana, siendo la primera matanza de su gobierno".