Permisionarios del servicio de transporte público de pasajeros, de diferentes líneas acordaron reducir hasta en un 50 por ciento el número de unidades que prestan el servicio en la capital, ante la contingencia por el COVID-19, por lo que recomendaron a los usuarios que no pueden permanecer en sus casas que tomen sus previsiones para no llegar tarde a su destino.

En entrevista el representante de la Unión de Transportistas de Puebla, Arturo Loyola González, informó que entre algunas líneas que tomaron la medida, se encuentran Azteca, 18, 61, 63, Perimetral, por lo que la frecuencia de paso es de mayor tiempo, y se espera que en los próximo días se coloquen cartulinas en las unidades para que la gente esté al tanto de cuánto tiempo deberá esperar.

“Al ser un servicio público necesario, no existe la posibilidad de suspenderlo, y se tiene que ver el costo beneficio porque también se trata de pequeños empresarios que están haciendo un esfuerzo para que quienes no tienen posibilidad de pagar el servicio de alquiler, o de redes puedan llegar a sus trabajos”.

Comentó que desde hace más de un mes al darse cuenta de la situación que estaba por llegar, se comenzaron a tomar medidas para sanitizar las unidades del transporte que consisten en lavarlas con cloro antes de que salgan a ruta, además al terminar cada vuelta se tienen contratados lavadores que limpian lo que son los pasamanos.

Señaló que al haberse suspendido la actividad en centros comerciales, escuelas, parques, cines, mantener todas las unidades en ruta sería incosteable por falta de pasajeros, así que se va dando descanso en algunos casos, y con ello se contribuye a que haya menos personas en la calle, recomendación que han hecho las autoridades.

De los autobuses de mayor capacidad que recientemente fueron adquiridos dentro del proceso de modernización, debido al mayor consumo de combustible se ha optado por mantenerlos guardados.

Comentó que se trata de Microbuses los que mayormente están ofreciendo el servicio, y algo que ha ayudado es que el precio de la gasolina se redujo hasta en un 40 por ciento, de lo contrario sería hasta el 70 por ciento de las unidades las que se encontrarían paradas.

Medidas complicadas

Arturo Loyola advirtió que no todas las medidas se pueden cumplir al pie de la letra, ya que en el caso de las unidades llamadas combi, o urban, el pedir que haya una distancia de metro y medio entre las personas, representaría que junto con el conductor tendrían que ir tres o cuatro personas por viaje.

Dijo que lo importante es que los ciudadanos que sepan que presentan alguno de los síntomas, tomen las recomendaciones que ha hecho la autoridad para no contagiar a los demás pasajeros.

Asimismo llamó a la gente a mantener la prudencia, y en caso de que vean que la unidad ya no tiene lugares disponibles para poder ir sentados, opten por esperar la siguiente, a fin de que no haya una conglomeración en un espacio reducido.

Llaman a un acuerdo

El representante de la Unión de Transportistas pidió además que haya una verdadera coordinación entre las autoridades estatales con las municipales en el tema de vialidad ya que hay una confusión por el tema del uso de cubre boca, ya que en la capital se ha querido infraccionar a los conductores por no llevarlo.

Recordó que a pesar del decreto del gobernador Miguel Barbosa, él mismo aclaró que era opcional, y que no habría sanciones para quien no lo utilice.

Sostuvo que los transportistas están dispuestos a cumplir con las medidas que fije la autoridad, ya que se trata del beneficio de los usuarios y la seguridad de los propios conductores que por necesidad no se pueden quedar en sus casas, y tienen que salir a trabajar.