Este 1 de Mayo se conmemora a nivel internacional del Día del Trabajo, pero al paso de los años se ha ido perdiendo el porqué de su origen.

De acuerdo con la historia, todo comenzó en 1886 con una manifestación obrera en Chicago, Estados Unidos en el que 300 mil trabajadoras iniciaron una huelga para que se aboliera la jornada laboral legal de aquella época que era de 12 horas al día. 

Al desatarse la violencia por no llegar a un acuerdo entre trabajadores y empleadores, el resultado fue de 67 oficiales heridos, así como miles de muertos. 

Tras estos actos el Congreso Obrero Socialista Internacional, celebrado en París el 1 de mayo de 1899, declaró que cada primer día de mayo se conmemoraría el Día Internacional de los Trabajadores.

En nuestro país, el Día del Trabajo se hizo posible gracias a los movimientos sociales laborales en Estados Unidos y Francia.

Algunos historiadores señalan que 20 mil trabajadores se reunieron en el zócalo de la Ciudad de México y marcharon contra los líderes obreros hasta el Hemiciclo a Juárez. Estaban acompañados por la Banda de Guerra y Música de la Escuela Industrial de Huérfanos.

Las exigencias buscaban igualar el contexto nacional con una jornada de ocho horas y contar con un día de descanso, es decir, los domingos.

Fue así que cuando se promulgó la Constitución Política de 1917, los derechos de los trabajadores fueron reconocidos y quedaron protegidos por la ley en el artículo 123.

En 1923, el entonces presidente de México, Álvaro Obregón decretó el 1 de mayo como Día del Trabajo en México, pero fue hasta 1925 que el presidente, Plutarco Elías Calles, estableció la fecha de forma oficial.