Durante la mañana de este domingo, el Gobierno de Azerbaiyán dio a conocer la entrada en vigor de la Ley Marcial contra Armenia, es decir, el uso del ejército para atacar la zona de Alto Karabaj.

De acuerdo con los reportes, tras los señalamientos del gobierno armenio de hacer ataques contra los civiles, el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán lanzó una “contraofensiva” en toda la línea de contacto en respuesta a los ataques.

Los combates en la frontera entre ambos países tienen registro desde el derrumbe de la URSS; sin embargo, el alto al fuego se había detenido en tres ocasiones hasta que a mediados de este año comenzaron las hostilidades.

Moscú, aliado de Armenia, donde tiene una base militar, y la Unión Europea (UE) han pedido un alto el fuego inmediato que permita “comenzar las negociaciones” y llegar a un acuerdo para evitar una guerra en plena pandemia de coronavirus.

De acuerdo con AFP, en julio aumentó significativamente la tensión en la frontera entre ambos países, con una escalada en las hostilidades que causó al menos 16 muertos, los choques más graves desde 2016.

Pese al alto el fuego acordado en 1994, la zona alrededor del Alto Karabaj y la frontera entre los dos países ha visto repetidos y letales combates en los últimos años.

La zona de Alto Karabaj o Nagorno Karabaj, controlado por Armenia en suelo de Azerbaiyán, es escenario de uno de los conflictos territoriales que quedó en el limbo tras el derrumbe de la Unión Soviética (URSS).

Según el Ministerio de Defensa de Azerbaiyán, Armenia ha violado el alto el fuego y lanzó a primera hora de este domingo “provocaciones a gran escala” con bombardeos intensivos contra las posiciones del Ejército azerbaiyano a lo largo de todo el frente y contra asentamientos en primera línea de la zona de conflicto.

Según la versión de Azerbaiyán, Armenia empleó en el ataque armas de gran calibre, dejando como resultado del bombardeo se han producido “muertos y heridos entre la población civil”, además de “graves daños en la infraestructura civil”.

Las fuerzas azerbaiyanas, apoyadas por tanques, misiles y artillería, aviación y drones, han destruido 12 sistemas de misiles antiaéreos de Armenia, según Bakú.

Azerbaiyán ha admitido el derribo de un helicóptero de combate por parte de Armenia, en tanto que Ereván aseguró que sus fuerzas han destruido dos helicópteros azerbaiyanos, tres tanques y tres aparatos aéreos no tripulados.

Tres décadas en guerra

Durante la época de la URSS, el Alto Karabaj era una provincia autónoma de Azerbaiyán, habitada por una mayoría de armenios.

En 1988, los armenios de la provincia aprobaron una resolución que reclamaba unirse a Armenia. Estalló entonces un conflicto que causó unos 25 mil muertos y centenares de miles de desplazados.

Para 1994, las fuerzas armenias se hicieron con el control del enclave y de otros territorios que reclama como una “franja de seguridad”. Se considera una región independiente y está unida a Armenia por un corredor.

Azerbaiyán estima que la solución al conflicto pasa por la devolución de los territorios y reclama que varias resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU lo respaldan.

En 1994, Bakú y Yereván alcanzaron un alto el fuego y encauzaron una resolución al conflicto en el marco de diálogo del llamado grupo de Minsk (codirigido por Rusia, EE UU y Francia y bajo el amparo de la OSCE), pero desde entonces se han producido incidentes.

El más grave hace cuatro años, que coincidió además con el deterioro de las relaciones entre Moscú y Ankara.