La deuda histórica de 318 millones de pesos del ayuntamiento creada por "gobiernos corruptos anteriores" se pagará durante esta semana, después de 16 años, advirtió Claudia Rivera Vivanco al valorar que ahora el 100 por ciento de los recursos beneficiará a la población olvidada por regímenes del pasado con obras de justicia social. 

Este tipo de acciones pone punto final al "despilfarro, corrupción y opacidad" con la que operaron las administraciones previas, priorizó la alcaldesa. 

Acompañada por el tesorero, Armando Morales Aparicio, recordó que el gobierno morenista recibió al comienzo de la administración 318 millones de pesos que alteraban a la gestión.

"La corrupción, el despilfarro y la opacidad con la que los gobiernos del viejo régimen se condujeron sin límites, significó para miles de familias poblanas no sólo décadas de rezago, sino un gran endeudamiento".

Los atrasos en pagos de la deuda por "esos gobiernos corruptos", acusó, generaron un impacto negativo en la administración porque los recursos se convertían en rehenes de los intereses, además de impedir usar al 100 por ciento los recursos en beneficio de la comunidad. 

Ante ese panorama desfavorable, subrayó la determinación de impulsar una política de austeridad y combate a la corrupción para enfrentar la deuda sin perjudicar a la población como incurrirán los gobiernos del pasado.

La liberación del último pago por 41 millones de pesos evitará a la administración mantener una carga financiera y los recursos estarán direccionados a la reducción del rezago social heredado por gobiernos anteriores. 

Precisó que las obras son de justicia social, atención a la reactivación económica, además de otros proyectos, incidirán directamente en la calidad de vida de los ciudadanos de colonias del sur y norte de la Angelópolis olvidadas por antiguos regímenes.

A pesar de la crisis económica generada por la pandemia del Covid-19, advirtió que al seno del ayuntamiento se prepararon con recursos propios y programas de austeridad y combate a la corrupción para permitir pagar la deuda y ahora se destinarán todo el capital para la atención del rezago histórico de la ciudad y en programas de justicia social.

Anualmente la administración tenía una carga financiera por 80 millones de pesos destinados al pago de intereses y capital, refrendó el tesorero, Armando Morales Aparicio. 

Recordó que la deuda contratada mantenía al ayuntamiento atado hasta el 2023. 

Precisó que fue el gobierno del 2005 adquirió una deuda por 480 millones de pesos, luego la gestión del 2007 contrató una adicional más por 150 millones de pesos y continuaron otras para alcanzar los 640 millones de pesos.

Valoró que después de varios años de pagos, la deuda histórica que recibió el gobierno de Juntos Haremos Historia era de 318 millones de pesos y esta semana se pagarán los últimos 41 millones de pesos para liberar a la administración y a las siguientes de carga financieras externas. 

Aplaudió que las finanzas sanas del ayuntamiento se conserven en beneficio de la población del principal municipio de Puebla.