Médicos becarios e internos de pregrado del Hospital General de Zacatlán realizaron un paro indefinido de labores, esto luego de que fuera ignorada su solicitud para ser vacunados contra la infección por SARS-COV2, decisión que tomaron por unanimidad.

“Los médicos internos de pregrado exigimos vacuna contra el SARS-COV2”, “No es irresponsabilidad cuidarnos para cuidar a los demás”, fueron algunas de las leyendas que se leían en las pancartas de los médicos becarios que se apostaron afuera del nosocomio de Zacatlán.

Expusieron que en las dos jornadas de vacunación no fueron incluidos y acusaron que presuntamente existieron dosis sobrantes que fueron regresadas a la ciudad de Puebla, por lo que lamentaron que las autoridades de Salud no los consideraron como personal de primera línea.

“Somos quienes hemos estado en contacto directo con pacientes sospechosos y confirmados positivos dentro del hospital. Rotamos en guardias normales ABC, en áreas como choque, triage, urgencias: sitios donde se han realizado maniobras de RCP y soporte ventilatorio".

“El peligro es inminente, convivimos con personal médico que ingresa al área de atención de Covid, eso implica un elevado riesgo por infección cruzada”, señalaron en entrevista vía telefónica los médicos internos quienes solicitaron el anonimato para evitar futuras represalias.

Finalmente, exigieron a las autoridades de Salud que sean considerados como personal médico importante y atiendan su solicitud de recibir la vacuna contra el SARS-COV2.