Día a día médicos internos de Zacatlán trabajan en la incertidumbre de contagiarse del coronavirus SARS-CoV-2, que produce la enfermedad de Covid-19.

Y aunque no han hecho paro de labores, se mantienen trabajando en protesta en el Hospital General de dicha zona de la Sierra Norte de Puebla, para recibir una vacuna contra la enfermedad.

Los jóvenes médicos señalan que deben ser vacunados por el riesgo que corren, aunque no están en primera línea de atención a pacientes con Covid-19. 

Uno de estos médicos internistas, informó que trabajan “Jornadas ABC” de 36 horas continuas, con descansos de 12 horas, lo cual los vuelve más vulnerables al virus.

Detalló que son más 100 médicos internistas y enfermeras de servicio quienes no fueron contemplados en la vacunación.

Aclaró que al Hospital General de Zacatlán llegaron las vacunas para el personal que ahí laboral e incluso se completó la segunda dosis de refuerzo contra el coronavirus, pero a ellos se les excluyó de este derecho.

“Que nos tomen en cuenta como parte del personal, aquí seguiremos hasta conseguir una respuesta favorable”, señaló uno de los jóvenes al señalar que becarios de enfermería tampoco fueron tomados en cuenta.