Unos 100 civiles fueron asesinados la noche del viernes por terroristas en la localidad de Solhan, provincia de Tagha, en el norte de Burkina Faso, informó hoy sábado la agencia oficial de noticias AIB. Entre las víctimas hay hombres, mujeres y 7 niños.

Según medios, las víctimas pertenecían a las milicias antiyihadistas de Voluntarios para la Defensa de la Patria, quienes fueron atacados después de la agresión a un puesto de apoyo civil al ejército en la zona, en la noche del viernes. “Todavía continuamos escuchando explosiones. El ejército está interviniendo”, habrían relatado testigos durante la mañana de este sábado.

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, condenó con firmeza el ataque contra la aldea en la región de Sahel.

A través de un comunicado atribuido a su portavoz Stephane Dujarric, el jefe de la ONU expresó su indignación por los asesinatos y subrayó la urgente necesidad de que la comunidad internacional redoble el apoyo a los estados miembros en la lucha contra el violento extremismo y su inaceptable número de víctimas.

El secretario general expresó sus más profundas condolencias a las familias de las víctimas y deseó a los lesionados una pronta recuperación y transmitió el total apoyo de las Naciones Unidas a las autoridades en sus esfuerzos por superar las amenazas contra la paz, la estabilidad y la unidad del país, dijo el comunicado.

Burkina Faso ha sufrido un repunte en la inseguridad en los últimos años debido a la presencia de presuntos grupos yihadistas, entre ellos la rama de Al-Qaeda en el Sahel, el Grupo para el Apoyo del Islam y los Musulmanes y el Estado Islámico en el Gran Sahra.

Con información de Xinhua y agencias.