A partir de hoy, 50 denominados “viene, viene” ya se encuentran integrados a un padrón establecido por el ayuntamiento y así tenerlos plenamente identificados y proceder con sanciones en caso de denuncias ciudadanas.
Además, el programa contempla la entrega de distintivos, credencialización y portación de chalecos con el fin de regular esta actividad de manera preventiva.
Al respecto, el titular del área, Pablo Montiel Solana destacó que a partir de este momento los “franeleros” están obligados a desempeñar sus funciones con transparencia y con la advertencia de que queda estrictamente prohibido condicionar cobros a los ciudadanos.
En consecuencia, el funcionario municipal aseveró que quien no cumpla con las condiciones establecidas, se procederá legalmente con sanciones administrativas y hasta la remisión al Juzgado Calificador para aplicar las sanciones correspondientes.
Indicó que a partir de este momento, todos los “franeleros” de estos dos lugares de la ciudad deberán tener sus distintivos a fin de ser identificados por los ciudadanos y en consecuencia hacer sus quejas correspondientes.
El funcionario municipal recalcó que estas personas ya son obligadas a recibir pagos voluntarios de los ciudadanos y no condicionar ni espacios y cuotas como estaban acostumbrados.