Luego del asesinato artero de un policía municipal a manos de delincuentes, el presidente municipal, Eduardo Rivera instruyó a la Secretaría de Seguridad Pública a que se obligue a los elementos al uso obligatorio de los chalecos antibalas y a mejorar los esquemas de respuesta.

Y es que uno de los errores que derivó en la muerte del agente fue el hecho de que no portara esta protección en su cuerpo pese a que el titular del área, Amadeo Lara Terrón afirmó lo contrario.

Tras evidenciar a su funcionario, el edil dijo que en todo momento los policías cuentan con las herramientas suficientes para protegerse ante un ataque de algún grupo organizado de delincuentes.

Sin embargo, confirmó que este elemento por alguna razón personal no llevaba puesto el chaleco antibalas al momento de ser atacado por los maleantes, situación que fue motivo de una llamada de atención al secretario de Seguridad Pública.

Tras manifestar sus condolencias a la familia del elemento caído así como su apoyo, Rivera Pérez aseguró que está debidamente documentado el hecho de que los elementos cuentan con las herramientas suficientes para realizar su trabajo con protección.

Indicó que en consecuencia la secretaría de Seguridad Pública tendrá la responsabilidad de hacer lo necesario para ayudar a realizar una mejor labor a favor de los policías municipales para reforzar el uso de todos los aditamentos de seguridad personal.   

El edil recalcó que los chalecos antibalas cumplen con las especificaciones de seguridad que marca la ley y se encuentran en buenas condiciones, empero, admitió que por desgracia este uniformado no lo traía puesto.

“Todos los elementos tienen su chalecos en buenas condiciones y cumplen con la normatividad, pero el policía al momento de enfrentar a los delincuentes no lo portaba a pesar de que está documentada la entrega de estos protectores no lo llevaba puesto”.