“Se trata de que si alguien viene del sur de la ciudad puede tomar la línea 2 del metrobús, cuando ya esté lista, hacia el centro histórico, y de ahí puede tomar la bicicleta pública y llegar a la zona del Centro de Convenciones; o alguien que llegue de Amalucan, toma la línea 1 del metrobús y se baja en la 11 Sur y toma la bicicleta para moverse a otro punto de la zona monumental”.
En la actualidad, reveló el regidor poblano, ese proyecto debe lograrse en la ciudad de Puebla, que puede ser respaldado por el Smart Bike, porque —desde su perspectiva— entre más redes de ciclistas se tengan, la ciudadanía va a utilizarlas mucho más.
“No hay que esperar a que haya muchos ciclistas para tener esa infraestructura, debemos de poner la infraestructura para que los ciclistas la ocupen”.
Desde el Cabildo poblano, en coordinación con otras instituciones y los grupos de la sociedad civil, agregó Domínguez Sánchez, ya realizaron recorridos por diversas vialidades de la capital poblana y encuentran que hay vías que son más riesgosas que otras, por ejemplo, dijo que hicieron un recorrido por la ciclovía universitaria, con representantes de la Universidad Autónoma de Puebla, con el Instituto Municipal de Planeación (Implan) y con la gente de la Secretaría de Desarrollo Urbano y se dieron cuenta de que hay calles que pueden ser compartidas con los ciclistas y automovilistas, porque hay calles donde circulan hasta por 30 kilómetros y otras por 60 o 70 kilómetros por hora, por eso tienen que evaluar qué tipo de ciclovías se instalarán.
Desde su perspectiva, se tiene que tratar cada una de las vialidades de la ciudad de diferente manera, porque reiteró que hay algunas con velocidades más amplias y obviamente hay que dar seguridad extra al ciclista.
“Estamos en el análisis del proyecto. Hacemos recorridos en campo para ver cómo se mueve la situación, por eso no puedo adelantar el proyecto, pero existe viabilidad y factibilidad para llevarla a cabo”.
Solución para 78% que no utiliza automóvil
El presidente de la Comisión de Movilidad Urbana del Cabildo poblano reveló que ahora que recorrieron las calles sin ciclovías observaron que hay muchos ciclistas que recorren las calles, porque las estadística indican que 78 por ciento de la población utiliza el transporte público y tienen que dar solución para ellos: “Eso estamos tratando de hacer”.
Ante eso, reveló que en busca de garantizar la seguridad de los ciudadanos que circulan por la ciudad de Puebla, en transporte público, en bicicleta y a pie, analizan de forma seria y con objetividad el proyecto y lo trabajan a conciencia para salvaguardar la seguridad de los ciclistas y de la gente que lo utiliza, pero se trata de un tema cultural.
“No nada más se trata de un tema de infraestructura o seguridad vial, es también cultural”. Porque, al final de cuentas, todos los ciudadanos caminan, en algún momento, de un lado a otro.
Es por eso, reiteró el regidor, que realizan los recorridos para analizar y buscar la mayor seguridad para todos, pero de la misma forma buscarán trabajar con la reglamentación y también con la cultura, por eso reveló que llevan a cabo reuniones con colectivos ciclistas, colectivos de asociaciones civiles, de peatones y gente con discapacidad, para platicar con ellos y ver los problemas que tienen.
“La idea es crear una agenda común del gobierno con la sociedad, pero esa agenda tiene que ir vinculada a la cultura”.
Desde su experiencia con el proyecto, todos coinciden en que uno de los principales problemas es la cultura vial de los automovilistas, del transporte público, de los peatones y de los ciclistas.
“Porque esos cuatro tipos de usuarios han cometidas algún tipo de violación al reglamento, exceso de velocidad, pasarse un semáforo, cruzar la calle donde no deben o ir en bicicleta en sentido contrario o pasarse el alto en bicicleta, por eso queremos que haya un respeto de la calle, porque la calle es de todos”.