El templo de Santa Anita, ubicado en el barrio del mismo nombre, sigue en deterioro, ya que quedó a medias su rescate, lo que podría generar peligros a los feligreses.
Este domingo las celebraciones en el templo del popular barrio de Santa Ana, nos serán muy distintas a la de años anteriores, debido a que continúa la cruzada por el rescate del antiquísimo inmueble.
“Solo le dieron una maquillada”, señalaron trabajadores del templo a Intolerancia Diario, al indicar que sigue el mal estado del templo, ya que solo se cumplió la primera de tres etapas.
En este templo se venera a la imagen de Santa Anita, madre de la Virgen María, desde el siglo 18.
Pero el valor de la parroquia no solo es histórico, sino también religioso, ya que cada año, cientos de mujeres llegan al templo a pedirle mediante rezos a Santa Anita, el milagro de tener un hijo.
Y aunque el mismo clero ha reconocido que se ha ido perdiendo la fe o creencias poco apoco, las jóvenes son representación que la tradición y creencia se niegan a extinguirse.
Según la creencia, las mujeres que tengan problemas para concebir o procrear un bebé, deben acudir a pedirle a Santa Ana que interceda ante Dios por el milagro de la vida, pero para ello tienen que barrerle en los costados del altar.
Una vez que barrieron con una pequeña escobita, todo lo juntado lo deben recoger y poner en una bolsita de tela, la que junto con un cordel se coloca en el vientre de la mujer, hasta que nazca el bebé.
“Nos dijeron que acudiendo a ella y pidiéndole un milagro de esta naturaleza nos lo iba a conceder y efectivamente hace dos años venimos y hoy nos presentamos con el bebé a agradecerle”, dijo entre lágrimas muy emotivas Ana Laura Martínez.
“Nos concedió el milagro, sea de la forma que fuera nos concedió el milagro, prometimos estar aquí cada año en su fiesta y por eso estamos acá toda la familia.”
–¿Cuánto tardaron en tener bebé?
–Tardamos cinco años y ahora tenemos un precioso bebé. Se llama Víctor Manuel y está muy feliz, nació el 9 de enero de 2010- dijo con sonrisa y lágrimas.
La cruzada a medias
Fue en marzo de 2014 luego de más de cuatro años, el templo de Santa Anita se vistió de gala, al terminarse la primera etapa de su recuperación.
Sin embargo, nuevamente se ha abandonado el proyecto, contaron feligreses y empleados, por lo que continúan con la labor de reunir los recursos para su restauración total.
Ahora en la temporada de lluvias, se ha notado más el mal estado, agrietándose las cúpulas nuevamente, por lo que ya se hace una colecta para que se impermeabilice.
Desde el año 2010, Intolerancia Diario, empezó a documentar la larga travesía de feligreses iniciada por el sacerdote Luis Maldonado Frutos, quien falleció apenas unos meses antes de ver concluida la labor.
Desde entonces el padre Pedro Rocha Martínez, de la orden de los Legionarios de Cristo, tomó la batuta ante el deceso del padre Maldonado Frutos.
El padre Pedro Rocha Martínez, en su mensaje a los fieles, dijo que el arreglo del templo es “un milagro del Señor”, debido a que mucho tiempo se había luchado por lograrlo, “ahora me tocó llegar a trabajar y esto incluye amistades que tengo”.
Margarita Carrasco Porras, presidenta del comité pro defensa de la dignificación del barrio de Santa Anita, A.C y cronista del lugar, indicó que los habitantes de la comunidad están sorprendidos por la celeridad con que se llevaron a cabo las obras de remozamiento en el templo y sus anexos.
Y es que dijo, en menos de cuatro meses a partir de la llegada del nuevo párroco, padre Pedro Rocha Martínez, de los Legionarios de Cristo, logró muchas obras materiales.
El remodelado del 16 de octubre de 2013 a los primeros días de febrero de 2014, tuvo una inversión cercana a los 4 millones 600 mil pesos
El trabajo incluyó remozamiento de templo, capilla, casa parroquial y salones parroquiales., aunque no se conoce el monto total del dinero invertido.
Sin embargo la inversión estaba calculada en 14 millones de pesos, debido sobre todo a que los cimientos están pulverizados, por lo que no se ha hecho nada.
“Personas de este barrio comentan que de pronto Santa Anita recibe atención oficial, ya que su parque fue remodelado recientemente, pero pasaron más de cuarenta años para que las autoridades se acordaran de este lugar histórico”.
Se hizo saber que hay aportaciones del gobierno federal, estatal y de donantes anónimos. Pero se negó a mencionar cantidades y nombres, dijo que solo informará al arzobispo.
Ahora está a cargo del templo en sacerdote Enrique Cuautle Saucedo, quien simplemente no ha podido obtener los recursos federales, sobre todo del INAH, los mismos por los que luchó hasta el fin de sus días el padre Luis Maldonado.
Recuadro
La restauración
Desde mucho antes del 2010, la iglesia de Santa Anita, se encontraba en muy mal estado, por lo que los feligreses emprendieron ese año la tarea de colectar recursos para su remodelación.
Según los mismos vecinos, es obvio que el templo ha sufrido el deterioro, debido al constante circular de tráileres de la fábrica La Italiana o Italpasta por la zona.
El padre Maldonado Frutas, informó en ese tiempo que la iglesia acababa de ganar el concurso de Fondo de Apoyo a Comunidades para Restauración de Monumentos y Bienes Artísticos de Propiedad Federal (Foremoba), el que consiste en un fondo para la remodelación de monumentos históricos.
Dijo entonces que el resto de los recursos serían dados por las autoridades federales y estatales por medio del Foremoba, aunque todavía no hay montos oficiales.
Sin embargo al paso de los años los recursos necesarios iban creciendo al hacerse un análisis de la estructura con especialistas y arquitectos, algunos del INAH y de Protección Civil, por lo que el monto de lo que se necesitaba ascendió a más de 14 millones de pesos.
Fue así como han pasado los años y los feligreses siguen haciendo sin número de kermeses, colectas, una de ellas inclusive en el zócalo de la ciudad en 2010, cuando llevaron las imágenes veneradas de Santa Anita y de El Señor de la Salud.
Pero ni de esta manera se ha logrado obtener los recursos necesarios, ni presionar al gobierno estatal, ni municipal.
Luego del fallecimiento del padre Maldonado Frutos, en octubre de 2013, el arzobispo de Puebla nombró al padre Pedro Rocha, de los Legionarios de Cristo, pero ahora está a cargo Enrique Cuautle.
Breve historia
El Barrio y el templo de Santa Anita, nació en 1546 cuando se realizó un asentamiento de indígenas tlaxcaltecas que llegaban a trabajar en la construcción de inmuebles y viviendas para la ciudad de Puebla.
Los tlaxcaltecas pidieron que se edificará el templo, ya que provenían de Santa Ana Chiautempan, por lo que pretendían venerar a la abuelita de Jesucristo y madre de la Virgen María.
Sin embargo la iglesia es reconocida oficialmente como el templo del Señor de la Salud, cuya imagen se encuentra en el altar mayor, un Cristo crucificado moribundo y a sus pies están las imágenes de la Virgen María y el apóstol Juan.
La actual imagen del Señor de la Salud, data de diciembre de 1898 creada por Salvador Guevara, antes de esa fecha se veneraba a otra imagen que se quemó cuando se incendió el altar mayor cuando estaba adornado con ceras y flores de papel.
El 4 de abril de 1863 el ejército francés cañoneó el templo de Santa Ana y en consecuencia queda casi totalmente destruida la torre norte del templo, señala el informativo local Tonatiuh, dirigido por Margarita Carrasco Porras.
A 455 años de su fundación del templo, el 23 de noviembre del 2005, finalmente la iglesia alcanzó el título de parroquia