El pasado miércoles por la tarde fue asaltada una de las unidades de la Línea 2 de la Red Urbana de Transporte Articulado (ruta) por tres hombres armados con pistolas, ante el hecho, las autoridades intentaron ocultar lo sucedido.

Fue justo el día de la reinauguración del estadio, entre las 18:30 y las 19 horas, cuando los pasajeros que viajaban en la Línea 2 del Metrobús, en la estación Cúmulo de Virgo que se ubica entre la calle Margaritas y el Club de Golf, fueron asaltados en el camión por tres sujetos con pistola en mano.

“Con armas de fuego amedrentaron al chofer, nos asaltaron a los usuarios y nos quitaron todas las pertenencias que llevábamos”, dijo una de las pasajeras, por eso dijo que el camión articulado se tuvo que parar para que bajaran los asaltantes, una vez que despojaron de sus pertenencias de los pasajeros.

Lo más lamentable, dijo la víctima, que solicitó la gracia del anonimato por temor a represalias, es que a todos los pasajeros el personal de seguridad les dio indicaciones claras que el hecho no podría ser ventilado ni podían levantar ninguna queja ni dieran a conocer esos acontecimientos ante las autoridades.

El camión, aseguró, llevaba casi la mitad de los pasajeros e iba de centro a sur, desde la avenida Margaritas al Club de Golf, hacia el mercado Independencia, “porque los tres asaltantes se bajaron en la estación que se ubica en el mercado Independencia”.

Apuntó que asaltaron a todos los pasajeros y amenazaron al operador del camión, pero después, en la estación Club de Golf, a los pasajeros le pidieron que no hicieran nada, “eso lo hicieron los integrantes del personal de seguridad que tiene la empresa privada que se encarga de la vigilancia interna”.

Coincidencia

Lo que refirieron los usuarios del Metrobús fue que resulta curioso y casual que les hayan pedido no denunciar, porque ese mismo día se inauguró el estadio llamado el chiquihuite azul, “y no les convenía que ese mismo día nos estaban asaltando en la Línea 2 del Metrobús por falta de vigilancia”.

Lo que deducen, dijo, es que seguramente ese día, todos los policías de Tránsito y de Seguridad Pública que vigilan la ciudad capital, estaban en los alrededores del estadio, esperando que la gente llegara para el show.

Reveló que después del asalto las personas que viajaban en el camión dijeron que al ser una concesión de ADO, ese sistema de transporte debería tener vigilancia, “el problema es que ahora ya nos suben los precios, porque tenemos que pagar las alimentadoras”. Dijo que la gran mayoría de las personas que fueron asaltadas vive en el sur de la ciudad, sobre todo en la región de la Unión Antorchista, “y la gente se fue bajando por miedo y con la impotencia de no poder denunciar los hechos, que ahora esperamos que ellos nos repongan lo robado”, concluyó.