Pagar un millón 400 mil pesos para comprar cuatro millones de litros de agua para cubrir el ojo recreativo del Parque Amalucan es un esfuerzo infrahumano para el Ayuntamiento, advirtió la titular de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente, Beatriz Martínez Carreño, al acentuar que la "alberca" es la única área cerrada para los visitantes.

A la largo de la sesión de la comisión de Patrimonio y Hacienda, aclaró que la obtención del recurso para poner en marcha el espejo se ha convertido en un verdadero desafío. 

Recordó que el cuatro de octubre de 2018, 10 días antes de tomar las riendas de la administración municipal, el gobernador Tony Gali Fayad realizó la entrega del recurso.

"Hemos hecho esfuerzos infrahumanos; el ojo del agua no es una alberca, es un espacio donde hay árboles". 

El parque cuenta con 74 hectáreas de extensión, pero únicamente se usa el 7 por ciento de ese gran perímetro.

"No está cerrado, vamos a hacer una evaluación, si bien no cerrar el ojo, poner otro atractivo porque hay que ser responsables, y tenga las condiciones; el parque está en buenas condiciones y no ha cerrado”.

Reveló que diariamente ingresan al parque entre 600 a 650 personas, pero el ojo de agua no cumple con su objetivo, no lo desaparecerán, pero los atractivos aumentarán.

Advirtió que la meta es recuperar tres cuartas partes y enfocarlas a otra vocación, pero eso derivará del estudio.

Las canchas deportivas, sin ningún inconveniente, indicó pueden pasar al Instituto Municipal del Deporte, como propusieron regidores del PAN. 

Martínez Carreño en su anteproyecto de la Ley de ingresos 2020 no propuso el cobro de estacionamiento ni uso de baños como lo había declarado en una entrevista, pero sí sugirió un pago por canchas de fútbol siete en 437 pesos, que fue rechazado y le sugirieron que debe ajustarlo a las tarifas del IMD, es decir 218 pesos.

Espectaculares

Durante la presentación del anteproyecto de Ley de Ingresos 2020, desechado por la comisión de Patrimonio y Hacienda, la secretaria pidió disminuir los costos para la instalación de espectaculares, en algunos casos de dos mil 777 pesos a 700 pesos.

Según Beatriz Martínez busca que todos los empresarios paguen porque actualmente retan a la autoridad y hasta amenazas ha recibido de algunos de ellos, pero omitió el nombre.

En su justificación, actualmente el proceso de retirar ocho espectaculares representa un gasto para la autoridad 300 mil pesos, dinero que actualmente no tienen, por ese motivo únicamente se coloca el sello de clausura.

Indicó a los regidores que los funcionarios de su dependencia están atados de manos para ejecutar cobros, pero además los propietarios anuncian que no van a pagar.

Reveló que aunque se supone que el municipio debe regular los anuncios, el gobierno del estado aún no otorga la facultad para desarrollar la acción.

Martínez Carreño explicó que 60 no tienen permisos, otros 60 más están en áreas verdes y siete han recurrido al amparo después de la promulgación de la ley que cede a los municipios la potestad para normar los anuncios.

Además ha sostenido 37 reuniones con dueños de espectaculares y seis mesas de trabajo con las autoridades de la zona conurbada para homologar la norma.

Los regidores también desecharon la petición de realizar una mesa de trabajo para convencerlos de la propuesta.

En la presentación se conoció del incremento de costos  para el diagnóstico, estudios, factibilidad de uso de suelo para la introducción de servicios públicos básicos hasta de 554 pesos, que este año se cobran a 195 pesos.

Silvia Tanús Osorio, regidora del PRI, reveló que además existía en la lista incrementos de hasta el 300 por ciento en los que no está de acuerdo.

La presidenta de la comisión de Patrimonio y Hacienda, Patricia Flores Montaño pidió ajustar la propuesta de acuerdo al índice inflacionario que es del 3 por ciento.