Mientras 40 mil familias se quedaron sin sustento por los mil negocios que han cerrado sus puertas en el corazón de Puebla por la crisis derivada del Covid-19, 2 mil de las 10 mil unidades económicas del Centro Histórico cambiarán de giro comercial cuando el semáforo epidemiológico permita el regreso a la reactivación.
Además, el presidente del Consejo de Comerciantes Establecidos del Centro Histórico, José Juan Ayala Velázquez proyectó que entre 18 a 24 meses comenzarán a tener una recuperación económica estable por la serie de deudas adquiridas hasta ahora para sobrevivir.
Priorizó que el tema más delicado es el que esas familias lo único que saben hacer es trabajar y al estar desprotegidas generarán un conflicto social de grandes dimensiones para la autoridad del gobierno estatal y municipal.
Lamentó la situación de la fuerza laboral por no contar con recursos económicos para lo mínimo indispensable, como comprar alimentos o pagos de los servicios básicos como renta y energía eléctrica.
Aclaró que la modificación de giros comerciales se generará por la incertidumbre económica y se hará efectiva para evitar la quiebra o cerrar definitivamente los negocios.
Valoró que varios dueños de negocios ya han comenzado a reinventar sus negocios para captar la atención de los clientes con novedades.
Reveló que son los pagos de rentas, impuestos, salarios, energía eléctrica, deudas y permanecer cerrados por más de 115 días consecutivo por el Covid-19 son los rubros que han generado pérdidas económicas incalculables al seno del sector empresarial.
"La falta de fechas para reabrir los comercios en Puebla a diferencia de la Ciudad de México en donde el Coronavirus a golpeado más a la población, pero los negocios ya abrieron de acuerdo a la nueva normalidad, la crisis genera el reinventa del sector para evitar mar cierres a los mil que van".
Ejemplificó que en algunas papelerías y zapatería dejaron de vender sus productos normales para tratar de comercializar cubrebocas, gel antibacterial, además de regalos de temporada y comida restaurantes, pero los productos tienen una inversión baja pero ajena a su vocación.