La regidora del Partido Revolucionario Institucional (PRI) defendió su bono de 240 mil pesos anuales aprobado por los gobiernos municipales del PAN al exigir cárcel para Armando Morales Aparicio, además de urgir a la Fiscalía  General del Estado (FGE) proceder en contra del Tesorero por falsedad de declaraciones sobre el retiro de las compensaciones a regidores del PAN  —Enrique Guevara Montiel, Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández, Carolina Morales López y Luz Rosillo Martínez— y el suyo.

El salario de un regidor es de 63 mil pesos mensuales libres de impuestos. 

A lo largo de la sesión ordinaria de Cabildo los regidores aprobaron dar entrada a la resolución del Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP), que pidió restituir la compensación a los regidores que demandaron al Ayuntamiento.

Los recursos de ese bono ocultado por las gestiones anteriores a la morenista se iba a direccionar a la ayuda a diferentes grupos sociales afectados por la contingencia sanitaria causada por el Covid-19. 

Ante esa perspectiva el morenista Iván Herrera Villagómez reprobó la determinación del TEEP a favor de los regidores que exigieron la devolución de sus compensaciones, al priorizar que la priista Silvia Guillermina Tanús Osorio y los panistas Enrique Guevara Montiel, Augusta Valentina Díaz de Rivera Hernández, Carolina Morales López y Luz Rosillo Martínez únicamente quieren seguir viviendo del dinero del pueblo y de los privilegios de la política anquilosada que los mexicanos reprobaron en los cómicos anteriores 

Subrayó que los 240 mil pesos son individuales y los políticos de viejo cuño que sangran a los ciudadanos reciben 60 mil pesos cada cuatro meses aparte de su salario jugoso. 

Herrera Villagómez pidió al Síndico Gonzalo Castillo Pérez interponer la inconformidad ante los tribunales federales correspondientes para evitar más robo de recursos al pueblo. Castillo Pérez anunció que el Ayuntamiento impugnará el fallo. 

Tanus Osorio recordó que cuando aprobaron retirar sus compensaciones, el grueso de los estaban atentando en contra de sus derechos laborales y era inconstitucional la medida.

Visiblemente furiosa conminó a los regidores de Morena y de Juntos Haremos Historia dejar la hipocresía a un lado, aceptar que fue un error aprobar esa decisión aun cuando sabían que era ilegal.

“No nos podemos a votar algo inconstitucional, se los dije, están actuando contra mis derechos laborales”, subrayó.